Ingerida correctamente puede brindarnos grandes satisfacciones
Esta bebida, muchas veces criticada y con muy mala fama, tiene varias virtudes para nuestro organismo que la hacen realmente importante, es por eso que no debemos eliminarla de nuestra dieta, ya que en la dosis justa es, entre otras cosas, un buen estimulante natural.
Hay quienes directamente no funcionamos sin un café en la mañana, es en resumidas cuentas el “combustible” para comenzar el día, lo malo es que muchos abusan de sus virtudes, y beben más de la cuenta, sobrepasando las cantidades permitidas de cafeína en el sistema y generando contraindicaciones, como por ejemplo un aumento en el ritmo cardíaco, palpitaciones, tensión arterial, irritabilidad, insomnio, ansiedad, intranquilidad, temblores y acidez estomacal.
Todos esos factores negativos no son más que producto de una mala utilización de esta bebida, que utilizada correctamente puede brindarnos grandes satisfacciones.
Los diversos efectos que causa en nuestro cuerpo:
– Actúa en forma eficaz nivelando y elevando la baja presión, el ritmo cardiaco y la adrenalina en nuestro organismo.
– Estimula y aumenta los niveles de las hormonas de epinefrina y estrés.
– Es muy estimulante en la producción de dopamina la cual es la hormona que levanta el ánimo y nos previene de la depresión.
– Tiene la particularidad de estimular y activar al intestino grueso por lo tanto tiene acción laxante.
– Actúa bloqueando la adenosina, esta sustancia nos ayuda a relajarnos y a descansar mejor.
– Hace que cuando los ácidos grasos entran en nuestra sangre los transforme en pura energía.
– Nos ayuda a tener una mejor concentración y a que nuestros reflejos estén siempre al máximo nivel.
La cantidad prudente serían 3 a 4 tazas (de 235 ml) diarias, idealmente antes de la 6 de la tarde para no afectar en buen dormir.
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