El consejo escolar del condado de Orange, región administrativa del estado de Florida, en los Estados Unidos, analiza la posibilidad de la adopción de un libro de la organización The Satanic Temple (“El Templo Satánico”). La entidad alega que, ya que el consejo permitió la difusión de materiales de cuño religioso en las escuelas públicas del lugar, ellos también tendrían ese derecho, según el principio constitucional de la libertad de expresión.
El libro en cuestión es The Satanic Children´s Big Book of Activities (“El Gran Libro de Actividades del Niño Satanista”, en su traducción literal), un libro didáctico con pasatiempos cuyo tema son las actividades del satanismo. Sus páginas contienen símbolos y textos en alusión a personajes comunes a los adoradores de Satanás. El grupo de personajes, todos de familias satanistas, están siempre involucrados con pentagramas invertidos, machos cabríos (y sus calaveras), rituales de invocación a demonios e incluso el ficticio libro de magia negra y prácticas malignas conocido como el Necronomicón. El perrito del grupo fue llamado Cerbero, en alusión a la bestia canina que custodiaba los portones del infierno en la mitología griega. En el libro, el contenido satanista está mezclado con “mensajes positivos”, como el combate al bullying.
Material religioso
La cuestión de la presencia de materiales religiosos en las escuelas y en otras instituciones públicas es constantemente discutida en los Estados Unidos. En la mayoría de los estados se prohibieron los símbolos sagrados como la cruz, pero, en algunos estados y condados lograron cambiar eso a causa de la autonomía legislativa que el país permite. Muchos activistas defienden que el Estado es laico (no debe sufrir la intervención de ninguna iglesia o religión), e incluso el Templo Satánico defiende esto, pero cree que si las iglesias pueden distribuir sus materiales, ellos tendrían el mismo derecho.
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