«Sed hacedores de la Palabra y no solamente oidores que se engañan a sí mismos». Santiago 1:22
Por tanto, cualquiera que ESCUCHA estas Palabras Mías y las pone en PRÁCTICA, será semejante a un hombre SABIO que EDIFICÓ su casa sobre la ROCA; y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella CASA; pero no se cayó, porque había sido FUNDADA sobre la ROCA. Y todo el que OYE estas palabras Mías y no las pone en práctica, será semejante a un hombre INSENSATO que EDIFICÓ su CASA sobre la ARENA; y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; Y CAYÓ, Y GRANDE FUE SU DESTRUCCIÓN. Mateo 7:24-27
«Hijo Mío, PRESTA ATENCIÓN a Mis Palabras, inclina tu oído a Mis Razones;
que no se aparten de TUS OJOS, GUÁRDALAS en medio de tu CORAZÓN.
Porque SON VIDA para los que LAS HALLAN, y SALUD para todo su cuerpo».
Proverbios 4:20-22
«El que tiene oído, oiga (¡ESCUCHE!) lo que el Espíritu dice a las iglesias». Apocalipsis 2:29