“Porque los ojos del SEÑOR recorren toda la tierra para fortalecer a aquellos cuyo corazón es completamente Suyo”. 2 Crónicas 16:9
O sea, no sirve de nada no robar, no mentir, no adulterar, no idolatrar. Es inútil esconderse detrás de la propia justicia.
Pues, si la persona parece tener una vida correcta en todo, pero existe algo o alguien ocupando el lugar del Señor Jesús dentro de ella, no hay forma de que reciba el Espíritu Santo, no es posible.
Ya que tener el corazón totalmente de Él es una exigencia de la Fe Inteligente.
Siendo así, ¡no podemos permitir que nada ni nadie dispute con el Señor Jesús por un lugar dentro de nosotros!
¡Él tiene que reinar absolutamente dentro de nosotros! Pues el Espíritu Santo no es derramado sobre una persona solo cuando Él es su mayor objetivo, ¡sino cuando Él es el único objetivo de esa persona!
¡Hasta recibir el Espíritu Santo, usted no puede estar dividido entre Él y nada más!