En este miércoles continuamos con el Estudio Bíblico sobre las Siete Manifestaciones del Espíritu Santo, en la Sede Nacional de Argentina.
“El Espíritu del Señor reposará sobre Él: Espíritu de Sabiduría y de Inteligencia, Espíritu de Consejo y de Poder, Espíritu de Conocimiento y de Temor del Señor.” Isaías 11:2
La sexta y la séptima manifestación del Espíritu Santo son fundamentales en la vida de todo cristiano: el Espíritu de conocimiento y el Espíritu de temor del Señor. La Palabra de Dios es vida, y se renueva cada día.
El Espíritu de conocimiento nos da discernimiento para identificar el origen de los problemas espirituales, emocionales y materiales; nos da dirección precisa para usar la fe inteligente, servir a Dios y conducir a las almas hacia el Altar sin confusión ni religiosidad superficial; y nos da protección contra el engaño, ayudándonos a no dejarnos influenciar por personas acomodadas, religiosas, irresponsables, arrogantes o incrédulas.
Conocimiento no es solo saber o estudiar, sino tener conciencia profunda de nuestro estado espiritual y de lo que Dios espera de nosotros como siervos e hijos.
“El principio de la sabiduría es el temor del Señor, y el conocimiento del Santo es inteligencia.” Proverbios 9:10
Cuando uno teme a Dios, significa que confía en Él y demuestra amor, especialmente en la intimidad. Para el pecado debemos ser cobardes, pero para los problemas debemos ser valientes para obedecer. El temor a Dios no es miedo, sino respeto profundo que lleva a vivir en santidad. Ese temor purifica, produciendo rechazo a la autosuficiencia, la ingratitud y todo lo que contamina; y sostiene, manteniendo al hijo de Dios en la cruz, en la sangre y en la Palabra hasta el último suspiro.
“Pero lo que tenéis, retenedlo hasta que yo venga. Y al vencedor, al que guarda mis obras hasta el fin, le daré autoridad sobre las naciones…” Apocalipsis 2:25-28
La única cosa que debemos obtener mientras estamos en vida es la Salvación, no familia, amigos o bienes. “Yo, Jesús, he enviado a mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y la descendencia de David, la estrella resplandeciente de la mañana.” (Apocalipsis 22:16 – LBLA).
En el nuevo día, Él siempre nos dará fuerza, ánimo y todo lo que nadie nos puede dar. Solo basta con buscarlo.