La vida de Rocío y de César era un infierno. Vicios, enfermedades, discusiones, violencia, entre otros serios problemas, estaban presentes en este matrimonio, y todo eso afectaba a toda la familia. Rocío llegó a fumar 50 cigarrillos por día y César estaba sumergido en el vicio de las drogas.
Pero toda esa situación pudo cambiar a partir de que comenzaron a participar de las reuniones de la Universal.
Vea, a continuación, la historia completa: