La sensación de interpretar al faraón Seti I en Los Diez Mandamientos es “un desafío apasionante”, así describe el actor Zécarlos Machado. Líder del pueblo egipcio, el personaje se caracteriza por las maldades y por el trato cruel que le da a los esclavos hebreos. Ya al comienzo de la producción, la personalidad del faraón quedó en evidencia en la escena en la que ordenó que los bebés hebreos fueron lanzados al Río Nilo.
Zécarlos Machado explica que la composición de Seti I exigió mucho estudio sobre la civilización egipcia, incluyendo la organización política y social, la cultura, los mitos y los rituales de la época de los faraones. Él destaca las conquistas y las contradicciones de aquel pueblo. “La civilización egipcia trajo conocimientos inestimables para la humanidad en áreas como medicina, matemática, astronomía y agricultura. La religiosidad egipcia delegaba al faraón poderes divinos, él era considerado el Dios vivo en la Tierra. Por lo tanto, el poder económico y militar formaban parte del imperio, así como la vanidad y la arrogancia. Fue un imperio como los demás, construido con la sumisión de otros pueblos al régimen esclavista”, analiza.
El actor pondera que el período en el que pasa la historia contribuye con algunas posturas cuestionables de Seti I. “Egipto era codiciable por los demás pueblos debido a su riqueza y por establecerse en las márgenes del Río Nilo, un lugar privilegiado”.
Aunque la historia del faraón Seti I esté íntimamente ligada a la intolerancia y a la opresión, la trama central de la película se concentra en los esfuerzos de Moisés para liberar a los hebreos de la esclavitud. En ese sentido, Zécarlos Machado cree que la trama puede estimular al público a rescatar valores olvidados: “Estamos contando una historia de liberación, tanto personal como colectiva”.
Fuente: Folha Universal
Hebreos perseguidos
En la Biblia, el faraón que ordena la muerte de los bebés hebreos y el faraón que persigue al pueblo durante la huida por el desierto no reciben nombres. En el libro de Éxodo son apenas citados como “faraón”. A pesar de las maldades cometidas por los comandantes egipcios, el período abordado en la película Los Diez Mandamientos no es el único en el que los hebreos sufrieron persecuciones.
Los libros de Daniel, Reyes, Jeremías y Crónicas, por ejemplo, indicaron que el rey Nabucodonosor, de Babilonia, atacó Jerusalén durante el reinado de Joaquín. Ese mismo rey también fue responsable por el asalto y destrucción del primer Templo de Salomón, que había sido construido por Salomón, hijo del rey David, de la tribu de Judá.
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