Científicos mendocinos revelaron que tomar 7 mates diarios disminuye notablemente los niveles de colesterol y triglicéridos. El mate es inocuo y además mantiene al cuerpo hidratado.
Se podría decir que al mate no le hace falta publicidad alguna para lograr adeptos; ya los tiene y hasta suscita fanatismos. Es el compañero inseparable de momentos de soledad o para cualquier actividad y forma parte del folclore de cuanto encuentro se realice. Como si el placer de tomar un buen mate fuera poco, ahora además descubrieron un novedoso aporte beneficioso para la salud, que se suma a los ya conocidos.
Un grupo de investigadores mendocinos concluyó que disminuye notablemente los niveles de colesterol y triglicéridos (principales grasas del organismo), y esperan poder instaurarlo como parte de su tratamiento.
“Quienes consumen esta infusión tienen 10 por ciento menos de colesterol total, 15 por ciento menos de colesterol malo y 35 por ciento menos de triglicéridos en relación a una misma dieta y estilo de vida”, sostiene el bioquímico Rafael Pérez Elizalde, integrante del grupo de la Universidad Juan Agustín Maza que arribó a este dato en el marco de una investigación en la que intentaban establecer una relación entre el cáncer de próstata y el sobrepeso.
Diversos factores le dan relevancia al descubrimiento. Principalmente que en el tratamiento de las alteraciones lipídicas los medicamentos son una alternativa que los médicos reservan como última instancia, mientras que intentan normalizar los valores de peso a través de dieta y ejercicios.
En este sentido y como puntos positivos, al hecho de que el mate ya está instalado como costumbre se suma que no tiene efectos negativos y es barato, además de otras ventajas de su consumo.
“La mayor parte de los medicamentos para el colesterol se metabolizan en el hígado y pueden provocar un daño hepático, a lo cual hay que agregar que suelen ser caros”, destacó Pérez Elizalde. Esto es lo que sucede sobre todo con la droga estatina, una de las más utilizadas, que además puede ocasionar daños musculares que conllevan dolor y hasta dificultades para caminar.
Beneficios
Según los investigadores, tomar 7 mates diarios logra un efecto similar al de esos medicamentos con diversos valores agregados. Esto se debe a las “saponinas” que contiene la infusión, que engloban las partículas de grasa y después son eliminadas sin absorberse.
El nutricionista Diego Messina, quien no sólo participó del trabajo sino que fue uno de los descubridores del beneficio, señala que “el mate aporta vitaminas del grupo B, magnesio, es antioxidante, tiene un ligero efecto diurético, produce saciedad y, por contener mateína, favorece la concentración y el rendimiento físico”.
Por otra parte, en pacientes con sobrepeso y obesidad, que generalmente tienen estos valores elevados, favorecería la pérdida de peso dado su poder de saciedad, en la medida que no lleve azúcar.
Luego de la investigación, esperan difundir el hallazgo para que los médicos utilicen el mate como complemento del tratamiento, mientras que en una segunda etapa se espera poder demostrar que puede reemplazar a la medicación.
La investigación
El efecto del mate sobre el nivel lipídico (grasas) fue un hallazgo que se dio de manera circunstancial en el marco de otra investigación en la que se intentaba establecer el vínculo entre el cáncer de próstata y la obesidad, la cual lleva cinco años y está por finalizar.
El grupo interdisciplinario es liderado por el médico urólogo José López Laúr y conformado además por Messina, Pérez Elizalde y los becarios Catalina Soto, Carla Corte y Laura Locarno.
Se tomó muestras a 90 hombres cercanos a los 60 años con sobrepeso u obesidad y con una alimentación y estilo de vida similares.
Messina subrayó: “Se trató de un estudio observacional y no experimental, es decir que se observó a las personas sin influir sobre ellas”.
El nutricionista detalló que con las mismas variables, la única diferencia determinante se dio con el consumo de mate. Así, quienes lo tomaban diariamente presentaron 10 por ciento menos de colesterol total, 15 por ciento menos de colesterol malo y 35 por ciento menos de triglicéridos, lo cual aunque parece poco, pese a su sobrepeso los dejaba dentro de los valores aceptados como saludables y sin riesgo al respecto, mientras que no sucedió lo mismo con quienes no bebían la infusión a diario.
Hay que destacar que el efecto se produce sobre las grasas exógenas, aquellas que ingresan al organismo por la alimentación y no sobre aquellas producidas por éste. Asimismo, no modifica el colesterol bueno o HDL.
Los investigadores esperan poder empezar ahora una segunda etapa en la que se haga un estudio experimental que abarque a hombres y mujeres de diferentes edades.