Os digo que todo aquel que Me confesare delante de los hombres, también el Hijo del Hombre le confesará delante de los Ángeles de Dios; mas el que Me negare delante de los hombres, será negado delante de los Ángeles de Dios. Lucas 12:8-9
¿Usted sabe qué es lo que el Señor Jesús quiso decir con eso?
¡La fe asumida es una Fe comprometida con Dios!
Quien posee esta Fe, confiesa al Señor Jesús delante de los hombres, no solo con palabras, sino con comportamiento y con calidad de vida.
La señal de esta Fe asumida es tener la vida en el Altar.
Un gran ejemplo fue Job:…varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:8
Y la consecuencia de eso fue el reconocimiento del propio diablo cuando Le dijo a Dios:
¿No le has cercado alrededor a él y a su casa y a todo lo que tiene? Al trabajo de sus manos has dado bendición; por tanto, sus bienes han aumentado sobre la tierra. Job 1:10
Y aun pasando por todo lo que pasó, confesó: Yo sé que mi Redentor vive. Job 19:25
¡Tengo la seguridad de que las personas que tienen la vida en el Altar se alegran con eso!
Colaboró: Obispo Romualdo Panceiro