La decoración en tonos rosa y las habitaciones impecablemente ordenadas recuerdan la casa de los sueños de cualquier niña. Sin embargo, lo que podría referirse a una fantasía, de hecho, es la inspiración para la realidad. La casa modelo ocupa un piso en el Templo de Salomón y ha sido una “escuela de la vida” para niñas, un ambiente pensado con cariño por la Big Sister responsable del Godllywood en Brasil, Fátima Bassini.
Hace aproximadamente 2 meses, un grupo de niñas entre 6 y 14 años han dejado los juegos de lado para aprender un poco más sobre las responsabilidades de la vida adulta, sin perder la inocencia de la infancia. Este es el objetivo principal del proyecto Godllywood School ideado por la escritora Cristiane Cardoso (de chaleco de jeans al lado de las otras profesoras en la foto de abajo) y administrado por esposas de obispos y pastores de la Universal, llamadas cariñosamente por las jóvenes alumnas de “tías”.
El “minicurso” se realiza una vez por semana y tiene una duración de 2 meses, dividiéndose en 8 módulos. Las clases son prácticas y abordan temas diferentes cada día. “¿Recuerda las cosas básicas que las abuelas les enseñaron a muchas madres y que ellas no tienen más tiempo para transmitir?” Aclara Méuri Luiza Assis (de vestido azul en la foto de al lado), una de las profesoras del proyecto.
Aprender a tener buenos modales y a ser hospitalaria es el primer módulo enseñado. “Muchas niñas ni siquiera saben cómo recibir a un invitado en casa. A veces, hasta se encierran en la habitación. Pero nosotras mostramos pequeños ejemplos de cómo ellas pueden ayudar a sus padres, poniendo un vaso con agua en una bandeja, ofreciendo un café, etc.”
Tener disciplina es la base de todas las clases. Durante el curso, las alumnas también aprenden a organizar un guardarropa, a comportarse en la mesa, a preparar los alimentos, cocinar arroz, preparar una ensalada, a limpiar el cuarto, la cocina y tienen hasta clases básicas de economía, esencial especialmente para las que hacen “berrinche” en el mercado. “Hicimos una simulación de una compra en un almacén y les dimos un valor menos a propósito, para concientizarlas sobre los precios. Así pueden entender que los padres trabajan mucho para conquistar lo que tienen”, explica.
Hija dotada y madre feliz
La pereza y la falta de interés en todos estos asuntos le impedían a la pequeña Andrielle Rezende (foto), de 9 años, a ser más activa en los quehaceres domésticos, y la que pagaba por el perjuicio era la madre, Karina Rezende, de 31 años. “Sé que la organización de la casa es mi obligación, pero Andrielle siempre se quejaba cuando tenía que arreglar la cama o la mesa.” Como alumna pionera del proyecto, ahora la niña tiene un comportamiento completamente diferente. “Ha sido maravilloso. Ella ha aprendido a arreglar la casa, comportarse en la mesa y a ser más organizada. Yo no esperaba tener este retorno. Me sorprendo cada día”, cuenta Karina.
Nuevos descubrimientos
En el quinto módulo, las niñas aprenden el cuidado de la salud, que va mucho más allá de una conversación sobre una alimentación saludable. Las profesoras tocan el asunto más curioso de la etapa de la edad: la pubertad. Con una clase a través de un video realizado por una ginecóloga, ellas aprenden sobre la primera menstruación, los dolores menstruales, los cambios en el cuerpo, etc. “Para las que aún no son ‘muchachitas’, nosotras les enseñamos a utilizar un absorbente higiénico, por ejemplo, y ellas quedaron impresionadas. Una niñita de 7 años le contó a su madre que había aprendido algo muy bueno con un nombre muy ‘raro’ y le preguntó si ella también había escuchado hablar sobre la ‘menstruación’. Es gracioso oír el retorno de las madres sobre los descubrimientos de sus hijas”, observa la profesora.
Bases para el futuro
Aunque se esté abriendo un mundo nuevo para este público joven, las profesoras garantizan que el principal enfoque de la Godllywood School es preservar la inocencia de las alumnas. Las voluntarias traen a los salones de clase un tema que, para muchas, parece no ser más un tabú: la virginidad. “Muchas piensan que la muchacha que no es más virgen es algo normal. Pero, demostramos que, además de sufrir al entregarse a varios muchachos, existen otras consecuencias: un embarazo precoz y no deseado, el abandono, ser madre soltera, entre otras desilusiones. Un hombre que realmente ama no necesita pedir eso como prueba de amor.”
Aunque cada módulo siembre una pequeña semilla para el futuro, es en el último que las alumnas reflexionan sobre lo que piensan para la vida adulta. Asuntos como “con quién ponerse de novias”, “cómo casarse bien” y “cómo ser una joven virtuosa”, formarán la base para lo que desean construir y aprenden que solamente con Dios podrán ser jóvenes exitosas en la vida.
Nuevas clases
El Godllywood School tiene abiertas sus inscripciones para niñas entre 6 a 14 años, a través de una contribución. Para más información envíe un e-mail a school@godllywood.com.
[related_posts limit=”17″]
