“Entonces su descendencia será conocida entre las naciones, y sus vástagos en medio de los pueblos; todos los que los vean los reconocerán, porque son la simiente que el Señor ha bendecido.” Isaías 61.9
Cuando se honra a Dios, ofreciendo lo mejor de su vida, Él lo ve, y no lo dejará en el olvido. El Altísimo lo bendecirá abundantemente, y hará que su ofrenda sea también conocida por todos.