Roberto: “Tenía un problema de salud, me salían ronchas en el cuerpo y me hacían sentir mal, inferior, me recluía en mi cuarto para que nadie me viera y así pasaba horas hasta que se me iban. Los médicos decían que era del hígado y tenía que hacer dietas hídricas pero siempre volvía a tener esos episodios. Esto duró años. En mi matrimonio había frialdad, por lo que busqué a una mujer afuera, una amante. Y en mi economía estaba mal, en la miseria, no tenía ni para comprar una cubierta para el coche con el que hacía un reparto de pan era terrible. Ese era mi el día a día, me limitaba en cada cosa que quería hacer. No tenía condiciones para comprarle ropa a mis hijos, eso me indignaba.
También tenía pesadillas, soñaba que peleaba, que levitaba y eso me ponía realmente mal, me angustiaba. Tenía nerviosismo, me alteraba y peleaba en la calle, llegué a bajarme con un palo para pelear. Mi hermana vio mi situación y me invitó a la Universal. Acepté y empecé a participar de las reuniones, a obedecer las indicaciones que me daban, puse en práctica la Palabra de Dios y al tiempo llegó la Hoguera Santa de Israel. Sacrifiqué y a los dos meses abrí mi negocio, una panadería y confitería con elaboración propia. A través de las siguientes manifestaciones de fe en la Hoguera Santa Dios siguió mejorando la situación, pero faltaba algo en mi vida.
Había comenzado a conocer a un Dios Vivo y Poderoso que cambia todas las cosas y no estaba conforme con la vida que tenía, quería cosas nuevas, buscaba que todo cambiara definitivamente. Entonces, llegó la Hoguera Santa en la fe de Gedeón y me lancé completamente porque estaba indignado y sabía que Dios me iba a responder con lo que yo estaba queriendo.
En esa Hoguera Santa manifesté mi fe y Dios hizo maravillas en mi vida. Las ventas aumentaron en el negocio, pude ampliar el negocio y agregarle una cafetería, tengo mi camioneta 4×4, mi matrimonio es una bendición, ahora estamos unidos, la respeto a mi esposa, aprendí a amarla.
Mi salud fue restaurada, el insomnio y el nerviosismo desaparecieron, hoy tengo paz interior y todo fue restaurado”.