“La ‘excelencia’ es un entrenamiento para la Salvación.
Una preparación, un ejercicio para conquistar la vida eterna”, afirmó el obispo Djalma en el segundo encuentro de Hombres Excelentes, realizado en el Templo de la Fe, en Almagro.
“Esto sirve para todas las áreas de la vida. Hay hombres distraídos y hombres excelentes. Cuando el espíritu del hombre es excelente en su trabajo se enfoca en hacer lo mejor, no en el dinero. Haciendo así, se destaca entre los demás, que hacen las cosas de cualquier manera.
En el matrimonio, muchos están distraídos, no están alertas. Su mujer clama por un poco más de atención, de amor, de cariño, pero él está distraído con muchas otras cosas. Los solteros deben estar alertas para elegir a una persona que se quedará con ellos durante toda la vida.
¡No sea un hombre distraído! Sea el hombre que siempre está alerta, preparado.
Si quiero una diferencia en el Cielo, soy yo quien tiene que hacer la diferencia acá en la Tierra.
Yo tengo la oportunidad de hacer todo con excelencia las 24 horas del día, y usted también. Todos tenemos esa oportunidad de manifestar el espíritu de excelencia”, completó, para luego orar por los hombres que reconocieron no haber estado alerta y deseaban manifestar el espíritu de la excelencia.
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