Una página en la web con más de 500 amigos. Personas de todas las clases sociales, edades y lugares diferentes. ¿Será posible tener una verdadera amistad con alguien con quien solo se tiene contacto “online”?
Para la psicóloga Regiane Machado, el afecto virtual existe, como un formato diferente de las amistades “en vivo”. “Ese tipo de relación involucra sentimientos, personalidades, preferencias y para mantenerlas, depende también de las partes involucradas. Además, se requiere la construcción de la confianza, complicidad y afecto “, dice Regiane.”
Pero no es tan sencillo contar con una amistad virtual y, que a veces, llega a evadir el contacto personal. “Uno de los maleficios es que la persona se quiera esconder detrás del mundo virtual, y surgiendo la oportunidad, debe evitarse llevar esa amistad a la vida real.”
Evitar la transferencia de esa amistad online a la vida real puede ser una señal de falta de cariño y afinidad. “Algunas personas no muestran quiénes son en el mundo virtual. Por eso hay que tener cuidado, ya que virtualmente o no, la persona estará perdiendo óptimas oportunidades de hacer buenos amigos”, enfatiza Regilane.
Pero también es peligroso cuando la amistad surge en la vida real y se vuelve virtual. “Llegando al mundo virtual, las personas se muestran más y pareciera que se expresan más libremente, dejando que el amigo perciba características que antes no notaba. Algunas veces pueden haber desentendidos y hasta inclusive romperse aquella amistad.”
Precaución en la vida online
La amistad debe tratarse de la misma manera, sea personalmente o solo por internet. “Es necesario actuar con sinceridad, cariño, afecto, complicidad, lidiando de forma muy similar a la de la vida real. Las diferencias referidas al contacto físico, o como se dice, la falta del ‘ojo en el ojo’. Por último, la construcción de una amistad depende de cada uno, siendo virtual o no”, concluye la psicóloga.
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