No importa el estado, el barrio o la región de Argentina, los domingos a las 18 hs., las personas de todo el país pueden dirigirse a los Cenáculos del Espíritu Santo para acompañar una reunión especial ministrada por el obispo Edir Macedo, que es transmitido vía internet.
El último encuentro 21, el obispo desde la Universal de Santo Amaro, en San Pablo, alertó a todos que lo que lleva a una persona a liberarse completa y total es entendimiento de la Palabra de Dios.
“Yo soy prueba de eso, porque yo era endemoniado, hasta que la verdad penetro en mí, entonces, hubo liberación. Pero esa verdad viene con la enseñanza de la Palabra. Dios nos da esa visión, ese entendimiento”, destacó el obispo.
Él destaco que la visión de la cual él se refirió no se trata de sombras, sino de tener conocimiento de la voluntad de Dios. Así, también como los sueños dichos en la Biblia no son frutos de las imágenes que el cerebro produce durante la noche, y así de los proyectos que vienen de lo alto para la vida de cada uno. “Usted debe tomar cuidado y razonar de forma consciente de que la fe tiene que estar asociada a la inteligencia, porque si no se torna una fe ciega, entrando en el fanatismo.”
“Existen visiones, sueños y profecías, pero todo de acuerdo con la Palabra de Dios, y no en el sentido personal, como muchos hablan. Por ejemplo: ‘Dios me está hablando para que usted se case con fulano’ o ‘para no viajar’ eso es del diablo, no de oídos a este tipo de revelación individual. La profecía, de acuerdo con el Texto sagrado, es para la edificación del cuerpo de Cristo”, aclaró.
Aun durante el mensaje, el obispo enfatizó la necesidad del cristiano tornarse un practicante de la Palabra de Dios y no un mero oyente, para que no se compare al hombre insensato, ejemplificado por Jesús en Mateo 7:24-27. “La Biblia dice que el hombre prudente construye la casa sobre la roca, así es aquel que escucha y practica la Palabra de Dios. Pero el que escucha y no practica es insensato, es como el que edifica la casa sobre la arena. Una casa sobre la arena no resiste las tempestades, los vientos. ¿Qué Dios espera que actué en su vida si usted conoce su Palabra pero no la práctica?”
Antes de llamar a los que querían entregar su vida 100% en las manos del Señor Jesús al frente del altar, para clamar a Dios, el obispo finalizó la predica enseñando que, cuando la persona está en la fe, tiene dentro de sí una luz extraordinaria, que la capacita a vencer todo y a todos: “Usted está preparada para todo o nada, no hay malicia. Significa, su cuerpo se ilumina, el diablo mira y respeta. Ahora, cuando no hay ese brillo en su ser, entonces la duda prevalece.”
