La acusación hace que la persona se sienta condenada delante de Dios
Hay personas que no reciben al Espíritu Santo porque el pecado las condena. Por eso, es necesario que lo confiese para que Dios las pueda perdonar.
El cuadro general:
Cuando una persona está atada al pecado, su conciencia pesa delante de Dios, porque sabe que oculta algo que está mal, algo que no debería haber hecho. Los espíritus malignos la oprimen y la acusan, haciendo que se sienta mal por lo que pasó. Esto afecta su comunión con Dios, porque comienza a dudar debido a la mala conciencia, y debe buscar el perdón del Altísimo para resolver el problema de la duda. El pecado hace que la persona tenga miedo y se preocupe porque la pueden descubrir y punir. Por otro lado, la conciencia limpia le produce confianza a la persona, la convicción que promueve la fe. Como está escrito:
«… acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura.» Hebreos 10:22
«Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.» 1 Juan 1:9
Qué hacer:
. Por este motivo, usted debe tener comunión con Dios y tener su conciencia limpia.
. Para que esto suceda, es necesario que confiese sus pecados.
. De esta manera, el Espíritu Santo reposará sobre su vida, porque usted tendrá fe para buscarlo y estará en comunión con Él.
Si ya tiene al Espíritu Santo:
. Tenga cuidado para que usted no se vuelva una «agua estancada», porque la Biblia dice que debemos ser una «fuente de agua que salte para Vida Eterna» (Juan 4:14).
El Espíritu Santo es un tesoro precioso que no desciende sobre todos. Por eso, ¿qué ha hecho usted con la vida que Él le dio? ¿Ha ayudado a sus familiares y conocidos? ¿Se ha empeñado en rescatar vidas del infierno?
Qué más debe saber:
. Entre los días 11 de abril y 1 de mayo se realiza el Ayuno de la Alegría Completa en todas las Universal.