No se trató de una pelea entre bandas, como creyó en un primer momento un vecino al escuchar el griterío y llamar al 911. En realidad, se trataba de un ataque salvaje de un grupo de delincuentes a un muchacho de 28 años para robarle. La Policía llegó, pero ya era tarde y no encontró a nadie. Los asaltantes lo golpearon fuerte en la cabeza y lo enterraron sobre un montículo de tierra negra removida. El joven murió ahí, se asfixió. En otro caso, delincuentes entraron en una casa y despertaron de una trompada al hombre, lo ataron a la cama, mientras su esposa de 85 años, hemipléjica era agredida. El hombre, murió tras sufrir un infarto. Otro hecho delictivo fue el asesinato con un disparo en la cabeza del tío paterno del futbolista “Pocho” Lavezzi que fue encontrado fuera de su camioneta con un disparo en la cabeza.
Un verdulero sufrió graves heridas al ser prendido fuego por encapuchados que lo asaltaron en su comercio de la localidad bonaerense de Lisandro Olmos, partido de La Plata. Su esposa y su hijo de 6 años también sufrieron quemaduras. Los ladrones, tras darle una paliza, lo rociaron con nafta, al igual que al comercio, y prendieron fuego para escapar con $30 000. Otro hombre, de 57 años, fue gravemente herido de un balazo en la espalda por ladrones que le robaron su camioneta en la localidad bonaerense de Villa Diamante, partido de Lanús. Y una mujer fue asesinada de una cuchillada en el abdomen por motochorros que le robaron su cartera, donde solo tenía $70 y dos celulares, cuando esperaba un colectivo en la localidad de Bosques, en Florencio Varela.
Todo indica que los niveles de violencia están altos y siguen en alza, a lo largo de todo el país hay miedo y alarma por los asaltos, violaciones, robos y sobre todo por los asesinatos.
Tal vez sea solo una “sensación”, como dicen algunos respetables funcionario, quizás, como afirman otros, la “prensa opositora” agiganta el tema para perjudicar a la administración. Pero admitamos que hay un problema de inseguridad con diferentes matices. Hoy en día vivimos en un mundo peligroso en donde los niños pequeños tienen que enfrentar muchas situaciones que les causa temor y miedo. Ver por la televisión casos en que los ladrones golpean e incluso matan padres frente a sus hijos es realmente dramático, son imágenes difíciles de olvidar. Sin embargo la Palabra Dios nos ayuda a superar cualquier hecho de inseguridad, cuando entregamos nuestra vida a Dios sabemos que Él nos cuida, nos da seguridad y protección aún en los momentos más peligrosos de la vida.
Dios esta listo para brindar esa seguridad que le hace falta tanto a usted como a su familia. Solo abra su corazón y pídale ayuda. Si usted nota que le hace falta la protección del Altísimo lo invitamos a participar todos los domingos a las 9.30 en la Universal más cercana a su domicilio. Usted verá la mano de Dios actuando en su vida.
[fotos foto=”Thinkstock”]
[related_posts limit=”7″]