La Universal llegó a Turquía a principios del 2015. Sin embargo, estos pocos meses de trabajo fueron suficientes para probar el poder de la fe y la fuerza que el propio Dios les da a los que llevan una palabra de alivio a los sufridos.
Liderada por el pastor Roberto Azevedo, la Universal ya realizó la Primera Caminata del Amor en el país, invitando a las personas que, incluso, aún no frecuentan la Universal. Los evangelistas también realizaron el primer bautismo en Estambul del joven Manuel entregándose al Señor Jesús. Las reuniones de la SuperAcción, a su vez, trajeron enseñanzas y generaron testimonios extraordinarios de quienes tuvieron la vida transformada.
Todos estos esfuerzos de los evangelistas para difundir la Palabra de Dios en Turquía han generado frutos y, uno de ellos, fue el reconocimiento del embajador brasileño en el país.
Cada vez más fuerte
El miércoles 29 de julio último, el responsable por la evangelización en Turquía, el pastor Roberto Azevedo, se reunió con el embajador de Brasil en el país, el señor Luiz Henrique Fonseca.
En la reunión, el pastor Roberto le regaló a Luiz Henrique la trilogía Nada que Perder, la autobiografía del obispo Edir Macedo, que ya ha vendido millones de copias en varios países.
“Los temas sobre la Universal fueron surgiendo y, al final de la conversación, él nos solicitó ayuda con los presos”, afirma el pastor Roberto. “Él entendió que solo a través de la fe viva esas personas tendrán la oportunidad de recuperarse”.
Las cárceles turcas albergan, actualmente, 53 brasileños, todos cumpliendo una condena por tráfico de drogas. En la reciente historia del país, nunca ninguna iglesia entró en las cárceles para consolar, evangelizar o concientizar a las personas. Esto y el hecho de ser un trabajo tan importante en la reinserción de los presos hacen que el pastor Roberto se anime por la oportunidad:
“Será de suma importancia para estas y otras personas que se encuentran en la misma situación.”
La carga de estar preso en un país extranjero es tan grande que, el último fin de semana, una brasileña le puso fin a su vida dentro de la celda. Ante esto, la experiencia que la Universal tiene en llevar esperanza a los más necesitados hará una gran diferencia.
“Mi expectativa para este trabajo es grande. Será el primer trabajo social desarrollado por aquí por la Universal. Tengo la certeza de que, a través de esto, otras puertas para la acción de los evangelistas también serán abiertas y muchas personas serán ayudadas”, concluye el pastor.
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