«VIENDO JESÚS LA FE DE ELLOS, DIJO al paralítico:
HIJO, tus pecados te son perdonados».
Marcos 2:5
«¿Qué es más fácil, decir al paralítico: Tus pecados te son perdonados, o decirle: Levántate, toma tu camilla y anda?
Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la Tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.
Y él se levantó, y tomando al instante la camilla, salió a la vista de todos, de manera que todos estaban asombrados, y glorificaban a Dios, diciendo: Jamás hemos visto cosa semejante».
Marcos 2:9-12
