La humildad es una de las virtudes más bellas que se puede encontrar en los seres humanos, y cuando la misma forma parte de la vida de un líder, por ejemplo, hace que él o ella sea aún mejor, como señaló un estudio publicado en la revista Administrative Science Quaterly. Esta cualidad permite que la persona lidere con más precisión, ayuda a la integración del equipo y crea un ambiente agradable y productivo.
Trayéndolo al lado espiritual, esta característica en una persona es tan importante que el propio Dios se encarga de recompensar a quien la tenga. Vea lo que la Biblia dice en el libro de Santiago 3:6: “Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes”.
Sobre el tema, el autor del libro “50 Tonos para el Éxito – Consejos para una vida próspera”, J. Edington, dedica un capítulo entero y le proporciona al lector importantes consejos, incluso, menciona esta enseñanza bíblica, aclarando que si la persona se mantiene siendo orgullosa, Dios se resistirá a ella, pero, si es es humilde, recibirá Su favor.
El autor también desmitifica la idea de que la humildad está relacionada a la pobreza, porque existen muchos pobres arrogantes y ricos humildes. Pero él explica que el humilde busca aprender más, principalmente con el Autor de la vida.
“La humildad es reconocer que no es autosuficiente. Todos los que llegaron con humildad, reconociendo que necesitaban el poder de Dios, vieron Su manifestación. La persona exitosa sabe que no es mejor que nadie, que tiene mucho por crecer y aprender. Tampoco tiene miedo de cambiar y no se aferra a “esta es mi manera de ser”, sino que siempre está abierta para mejorar “su manera de ser”. Reflexiona en un fragmento del libro.
La reacción de los humildes
El humilde reconoce sus errores y quiere cambiar. Él no se ofende fácilmente y no se niega a escuchar. Tampoco guarda rencor.
“Incluso, la humildad también es un arma para utilizar en una humillación. Cuando el orgulloso es humillado, generalmente, toma las peores decisiones. Se victimiza, guarda rencor, piensa en vengarse y, en la primera oportunidad que tiene, también humilla. Sin embargo, la persona que es humilde reacciona de otra manera. Ora por aquellos que la maltratan. Quiere que ellas vivan mucho para que se den cuenta de que están equivocadas y que puedan cambiar la manera de ver las cosas.”, aclara el autor.
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