Es muy común que las escuelas promuevan actividades para que los padres de los alumnos estén presentes. Generalmente en la celebración del Día de los Padres o de las Madres, los hijos tienen oportunidad de estar con ellos en el colegio.
Pero, ¿qué sucede con los niños que, por algún motivo, no tienen a uno de ellos presente? El momento que debería ser de alegría puede volverse triste y solitario.
Pero Yevette Vazquez (foto), una madre soltera de Texas, Estados Unidos, encontró una forma diferente de lidiar con la situación.
Al dejar al hijo, Elijah, de 12 años, en la escuela, ella notó que había más autos que de costumbre. Fue cuando el niño le dijo que estaban haciendo el “Día de las Donas con el padre”, para celebrar los “lazos paternales”. Ella no quería que el hijo dejara de participar del evento, entonces, decidió que aquel día ella se convertiría en “padre”. Volvió a su casa, se sacó el maquillaje, los aros, se recogió el cabello y también se puso una camisa cuadrillé y una gorra. Para rematar el disfraz, se puso un bigote falso y se perfumó con una colonia masculina.
“Yo sé que ver a los otros padres con los niños no es fácil para mi hijo, pero la vida es así. Yo intento hacer lo posible para ponerle una sonrisa en el rostro. Ya habíamos pasado por esto varias veces. Fue la primera vez que logré enfrentarlo de una forma positiva, en vez de sentirme mal”, escribió Yevette en el epígrafe de la foto de ella vestida de hombre, al lado del hijo, que posteó en una red social.
La imagen ya fue compartida miles de veces y levantó el debate sobre el hecho de que muchas escuelas hagan eventos exclusivos para padres, en lugar de actividades que incluyan a las familias no tradicionales.
Proyecto T-Amar
Esta es solo una más entre las innumerables peleas que las madres solteras enfrentan. Además de, muchas veces, lidiar con dificultades, inclusive materiales, además viven los desafíos diarios de educar a los hijos solas.
Para ayudarlas en esta tarea, la Universal creó el Proyecto T-Amar, que brinda asistencia especialmente a las madres que crían a sus hijos solas.
El objetivo es amparar, apoyar y orientarlas para que aprendan a vencer los desafíos personales y familiares. Las consejeras ofrecen apoyo emocional, espiritual y orientación en el cuidado de los hijos, además de, siempre que es posible, realizan acciones sociales y donaciones.
Mensualmente se llevan a cabo encuentros. Para más información, acérquese a la Universal más cercana.
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