“No necesito medicamentos”
Juana: “No podía conciliar el sueño, la doctora me dijo ‘tome la mitad de esta pastilla’, en una noche tomé ocho, pero no pude dormir. Estuve años así, todo era difícil. Usé el Lienzo como nos enseñaron en la reunión, debajo de la almohada. Ahora duermo en paz, no necesito medicamentos. Además, me doy cuenta que estoy distinta, mi vida cambió”.
“El tumor desapareció”
Antonia: “El martes fue la primera vez que vine. Sufría mareos y dolor en los huesos y tenía que operarme de la cervical. Pero usé el Lienzo y obedecí. Logré dejar las pastillas, no tengo mareos y las molestias se están yendo. Por otro lado, pedí que oraran por mi hija que tenía cáncer. Luego, ví que ella escribió: “… feliz con la noticia, el tumor desapareció”.
“Sufrí durante años”
Mabel: “Tenía mucho dolor en la espalda, hacía años que lo sufría. Tomaba analgésicos y continuaba adolorida. Hasta que usé el Lienzo, ahora estoy mejor. Puedo agacharme, el dolor se fue y duermo tranquila. Además, tengo un sobrino que tenía asma, estaba mal. Pedí por él acá y esa misma noche, la madre me dijo que está bien”.
Recuperó la vista
Ella tenía problemas de salud y participó de las reuniones de los martes: “En mayo tuve un accidente en el ojo y no podía ver. Fui al oftalmólogo y me dio gotas para la vista”.
A pesar de eso, no se resignó: “Usé el Lienzo Consagrado, me lo colocaba en el ojo y le pedía ayuda al Señor. Gracias a Dios, estoy recuperada del ojo. Ahora puedo ver”.
Martes a las 8, 10, 16 y principalmente a las 20 h en Av. Corrientes 4070 – Almagro o en la Universal más próxima a su casa.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en este periódico, como en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben ser interpretados en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.
Si usted quiere comunicarse con nosotros, puede hacerlo llamando al (011) 5252-4070.