1 – Mantenga su nombre y su reputación, porque valen más que los bienes y las riquezas (Proverbios 22:1);
2 – Sea inteligente. Cuando perciba que hay peligro alrededor, aléjese. El insensato prefiere correr el riesgo y termina pagando las consecuencias (Proverbios 22:3);
3 – Procure ser humilde de espíritu y temeroso a Dios. Las recompensas para quien es así son riquezas, honra y vida (Proverbios 22:4);
4 – Esté lejos de la persona malvada. Ese tipo de gente tiende trampas en el camino. Proteja a su vida, manteniendo la distancia (Proverbios 22:5);
5 – Eduque bien a los niños, de acuerdo a las cosas buenas que usted piense para ellos. Eso los ayudará a no ir por otros caminos, aún con el pasar de los años. Cuando fuera necesario use la disciplina, ya que la tontería está dentro de sus corazones (Proverbios 22:6;15);
6 – Sepa que lo que siembre, también lo cosechará. Si fuese injusto, también recibirá la maldad como vuelto (Proverbios 22:8);
7 – Sea sincero, amable, delicado y fino al expresarse. Siendo así, inclusive el rey será su amigo (Proverbios 22:11);
8 – No cultive la pereza. El perezoso confiesa su derrota de antemano y no lucha para vencer (Proverbios 22:13);
9 – De oídos a los consejos de Dios. Así, usted tendrá confianza en Él y sabrá responder con claridad a quien le consulte (Proverbios 22:17-21);
10 – Aléjese del que vive malhumorado y no ande con personas que se enojan fácilmente, para que usted no termine igual a ellos y se perjudique así mismo (Proverbios 22:24-25);
11 – Si usted no puede cumplir algo, no se comprometa. Si usted no tiene como pagar, no corra el riesgo de perder hasta la cama donde duerme (Proverbios 22:26-27);
12 – No saque los límites que sus padres le dejaron (Proverbios 22:28);
13 – Procure ser competente, pro-activo y habilidoso en su trabajo. Quien actúa así es promovido y no queda entre los de posición inferior (Proverbios 22:29).
Basado en el capítulo 22 del libro de Proverbios, el libro de la Sabiduría…