Cuando una relación se termina, muchas mujeres piensan que aún hay una oportunidad para volver a estar juntos. ¿Hay posibilidades de que las cosas vuelvan a ser como antes? Sobre este tema orientan los autores de Matrimonio Blindado, Renato y Cristiane Cardoso.
“Varias mujeres están en la misma situación y se preguntan si vale la pena continuar con la expectativa de que el hombre regresará. Tienen dudas de que las cosas puedan mejorar. En la Terapia del Amor hay muchas mujeres que pasaron por eso, no solo por semanas, sino por meses y hasta por años, ellas encontraron en esta reunión las fuerzas para luchar. Nada a su alrededor daba señales de cambio, las cosas estaban de la misma manera, pero ellas mantenían sus esperanzas. Muchas de las personas que se quedan dudando no tienen la esperanza de que la persona amada va a regresar. En cambio quienes participan de la Terapia del Amor han rescatado esa esperanza”, dice la autora.
Entiende que primero necesitas pensar en ti y no en otra persona. Debes buscar luchar por ti misma y por tus hijos. Si te enfocas en tu ex, vas a deprimirte, indignarte y desgastarte. Y tus hijos van a darse cuenta de tu estado, porque vas a vivir en función de esa relación destruida. Eso no es vivir. Vas a verte mal, menos agradable y muy poco atractiva como para tener la chance de que vuelvan a estar juntos.
“Hay otro agravante, pues, muchas veces, el marido regresa y el problema no se resuelve. Puede empeorar, pues usted puede vivir desconfiada, recordando lo que sucedió y recriminándoselo. El regreso de él no es la solución para usted. Primero, usted tiene que definirse como persona. Cuando usted participa de las reuniones que hacemos, comienza a entender cosas que nunca había pensado que eran problemas. Ve dónde es que necesita mejorar, no solo para la relación, sino para la vida”, agrega Cristiane.
“Quisiera destacar para todas las personas que están en ese dilema entre luchar por la relación o desistir que tener esperanzas no es sentarse a esperar. Tener esperanzas es trabajar por lo que usted espera. Si usted ha esperado que la situación cambie y no ha trabajado para eso, está sacrificando su esperanza, se está engañando. Aunque la palabra esperanza sugiera una espera, se refiere a luchar por lo que desea. Usted tiene que pensar en lo que puede hacer para estar preparada para el día en que su matrimonio sea restaurado. ¿Qué puede hacer? Usted no puede hacer que su marido regrese, no puede hacerlo dejar a esa otra mujer, pero puede volverse una persona que no puede ser traicionada porque es muy valiosa. Eso puede hacerlo ahora, mientras está esperando. Cuando usted viene a la Terapia del Amor, usted hace ese trabajo de prepararse, de mejorar como persona, de invertir en sí misma. Recuerde que quedarse con los brazos cruzados solo es pérdida de tiempo”, explica Renato.
La restauración es posible
Jorge Bres siempre quiso ser feliz, desde chico sufrió mucho por recibir maltratos por parte de su padre y se escapó de su casa. Vivió solo hasta que se casó con la esperanza de lograr ser feliz, pero no fue así.
Se separó de su esposa, había engaños mutuos, peleas y agresiones. Su exesposa llegó a la Universal primero, porque la había invitado el hermano. Lo invitó a Jorge y, aunque estaban separados, él aceptó participar de las reuniones porque vio un cambio en ella. Usó su fe, invirtió en él mismo y en siete meses recuperó a su familia. Dios hizo posible la reconstrucción de su vida.
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