Tener éxito en los negocios no es una tarea fácil. Y tampoco debe serlo. Una cosa que aprendemos, no solo cuando comenzamos a emprender, sino a lo largo de la vida, es que debemos conquistar, establecer aquello que queremos y trazarlo como meta.
Actitudes de un emprendedor exitoso
Un reciente estudio hecho por la Universidad de Harvard, en los Estados Unidos, muestra que las estructuras de trabajo cambiaron mucho en los últimos 20 años, con la globalización e internet. La investigación apunta 8 ítems imprescindibles para alcanzar el éxito. Vea abajo:
1. Administrar problemas, tomando decisiones aún delante de sistemas que cambian cada vez más rápidamente;
2. Administrar negocios globales, teniendo conocimiento de lo que sucede en los mercados alrededor del mundo.
3. Ser un líder efectivo, que se concentra en su objetivo y por otro lado estar preparado para cualquier oportunidad o adversidad;
4. Promover innovación, independientemente del éxito que usted tenga ahora, para no ser obsoleto después;
5. Tener una buena red de relaciones, principalmente con los clientes, distribuidores y compañeros;
6. Inspirar el compromiso de los empleados, haciéndolos sentir el valor propio y que sepan que son capaces de crecer junto con la empresa;
7. Saber adaptarse a los cambios, manteniendo los ojos abiertos para las nuevas oportunidades;
8. Tener habilidad para aprender, sea estrategias de negocios u otra disciplina que crea necesario para el buen funcionamiento de la empresa.
Algunas de las actitudes descriptas arriba indican riesgos para aquel emprendedor que se muestra tan solo como el jefe sentado en la silla de la dirección y no como alguien enterado del mecanismo de su empresa, cuando debería estar conectado a todas las etapas del planeamiento, consolidación y motivación de su negocio.
No tenga miedo de correr riesgos
Una de las mejores motivaciones para alcanzar el éxito en los negocios es no tener miedo de correr riesgos.
El conferencista y escritor J. Edington afirma, en su libro “50 tonos para el éxito – Consejos para una vida próspera”, que para tener éxito, el emprendedor necesita perder el miedo de arriesgarse y ampliar la visión. “Lo que define el resultado, es su forma de enfrentar los desafíos. Si tiene visión, ningún desafío será demasiado arriesgado para usted”, destaca.
Eso no quiere decir que tenga que tomar actitudes inconscientes o colocar su negocio o su vida en una situación de riesgo. Por eso, el autor explica que existen dos tipos de riesgos: el emocional y el racional.
“Quien se guía por su corazón no calcula, no planea. Arriesga y espera a la suerte. Por otro lado, arriesgarse motivado por la razón es garantía del éxito. Dos personas pueden hacer exactamente el mismo movimiento de riesgo en el juego de los negocios, pero el resultado va a depender directamente de la motivación interior que las llevó a aquella decisión. Lo que mantiene su fuerza y confianza para nadar en contra la corriente y alcanzar lo que nadie más alcanzó es su fe, la certeza racional del resultado que usted espera. Eso ninguna emoción lo puede traer,” afirma el escritor.
Participe y aprenda a conducir su vida rumbo al éxito. Para ver la dirección más cercana a usted ingrese aquí.
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