No trates de convencer a tus familiares, amigos y conocidos sobre cómo deberían actuar:
ahí está la clara señal de lo que no funciona. Permití que el Espíritu Santo sea Quien los convenza de lo que deben dejar de hacer mal y empezar a hacer bien; así te pasó a vos y a mí.
- Los que fueron convencidos por insistencia o persuasión tuvieron “fecha de caducidad”: un día, dejaron de dar crédito a lo que escucharon.
- En cambio, quienes recibieron la Fe Inteligente como una Revelación del Espíritu Santo no solo dieron crédito a lo que escucharon, sino que creyeron de verdad, y nunca más volvieron atrás, permanecieron.
Esta es una verdad profunda y poderosa: quien ama, valora y cuida, porque el amor genuino no es solo una emoción, sino también acción, compromiso y presencia.
De hecho, el Señor Jesús no solo dijo que nos amaba, sino que además lo demostró con cuidado, sacrificio y una entrega total.
Por eso, el verdadero amor siempre se traduce en protección, atención y fidelidad.
Aplicación práctica para esta semana
- En la familia: amar es cuidar con paciencia, escuchar con atención, corregir con ternura.
- En la fe: amar a Dios es cuidar nuestra relación con Él, obedecer Su Palabra, honrar Su Presencia.
- En la Iglesia, en tu Barrio y en tu Trabajo: amar al prójimo es cuidar su dignidad, dar buen ejemplo, ayudar siempre que puedas y valorar su alma.
Recordatorio: la Caminata del Amor será el Sábado 11 de Octubre; y el kit muy pronto estará disponible en nuestra librería.
Texto base:
“Por tanto, tened cuidado cómo andáis; no como insensatos, sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos«. Efesios 5:15-16
Reflexión personal
- El amor que no cuida no es amor.
- El amor que cuida transforma.
Y vos, marido, esposa, padre, madre, hijo/a o hermano/a, ¿ya pensaste que al practicar y compartir estas verdades estás sembrando una semilla de conciencia espiritual que puede salvar almas y vidas?
¡Nos vemos en la IURD o en las Nubes!
Obispo Julio Freitas