“Sabemos que todo el que ha nacido de Dios, no peca; sino que aquel que nació de Dios lo guarda y el maligno no lo toca.” 1 Juan 5.18
Quién encontró al Verdadero Dios y experimentó el Nuevo Nacimiento, desde ese día en delante pasó a tener una nueva vida, en total dependencia del Altísimo. Todo lo que fue practicado hasta entonces fue perdonado y olvidado, todo pasó a ser diferente, con otros valores. Y las demás cosas fueron colocadas en segundo plano, pues la prioridad pasó a ser su Amado Señor y Redentor.