Es común oír a algunas personas que dicen que no creen en la existencia de Dios por la crueldad que hay en el mundo. “Si Dios realmente existe, ¿por qué permite tanto sufrimiento?” Preguntan.
Por otro lado, están los que atribuyen a Dios la responsabilidad de todos los problemas, enfermedades y desgracias que les sobrevienen, alegando tratarse de un karma, de una prueba, una cruz que tienen que cargar o algo de ese estilo.
“Esa es la mentalidad de hoy”, dice el obispo Clodomir Santos al responder la duda de una oyente durante el programa “Habla que te escucho”.
“Quería entender lo que Dios quiere decir con eso”, dijo el oyente al pedir que el obispo aclare lo que está escrito en la Biblia, en el libro de Oseas, capítulo 6, versículo 21:
“Venid y volvamos al Señor; porque Él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará.”
El obispo explicó que en aquel tiempo estaba la idea de que el mal provenía de Dios. Inclusive los profetas pensaban de esa manera. Así como hoy, las personas piensan que su sufrimiento es la cruz que tienen que cargar y que la enfermedad es la prueba. Pero no es eso. Dios solo permite la acción del mal en la vida de aquellos que viven en la desobediencia. Sin embargo, el Dios que permite eso es el mismo que cambia la situación cuando nos volvemos a Él.
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