“Tenían que hacerme un trasplante de riñón”
Elizabeth: “Tenía toxoplasmosis, problemas renales, quistes y hemorragias. Llegué a la reunión de los Casos Imposibles muy mal, yo misma era un caso imposible porque no había forma de superar esas enfermedades. Iba de un médico a otro, en un momento me dijeron que tenían que amputarme una pierna y trasplantarme un riñón.
Tomaba 16 pastillas por día, pero gracias a Dios, al perseverar logré mi sanidad total. No tomo más medicación, no hizo falta amputarme la pierna ni realizarme un trasplante, estoy sana”.
“Mi hijo tenía un tumor y debían operarlo”
Marcela: “Mi hijo tenía un tumor en la ingle. Él era bebé, yo lo estaba cambiando y se lo descubrí, había salido de un día para el otro. Lo llevé al médico porque pensé que era una hernia, pero dijeron que era un tumor y había que operarlo para extirparlo.
Mi mamá me habló de la reunión de los Casos Imposibles y decidí venir a luchar y perseverar por mi hijo. Tenía fecha marcada para la operación y la orden del cirujano, pero en el último control la doctora lo revisó, le hizo una ecografía más y no hubo forma de encontrar el tumor, ya no quedaban rastros”.
Si usted tiene un imposible en su vida o en la de algún ser querido, acérquese a participar de la reunión de los Casos Imposibles este sábado a las 9, 19 y especialmente a las 15 h en Av. Corrientes 4070, Almagro.
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