Según el ránking elaborado por la Universidad de Belgrano a partir de la metodología que usa el Fondo Monetario Internacional, el país ocupa el puesto 19 a nivel mundial, superando a Brasil y Chile, e igualando a España.
El salario mínimo vigente en la Argentina, de $ 1840 en la actualidad, se ubica en el tope de América Latina y en el puesto 19 a nivel mundial, según un estudio comparativo realizado por la Universidad de Belgrano. Para confeccionar el mismo, los investigadores tomaron en cuenta la real capacidad de compra de los salarios en cada país, es decir, la cantidad de bienes y servicios que se pueden comprar con el sueldo mínimo en cada nación comparada.
En este sentido, el ránking utilizó el índice de Paridad de Poder Adquisitivo (PPA) que elabora para cada país el FMI. En tal sentido, si un salario medido en términos de PPA es mayor en un país que en otro, ello equivale a decir que dicho salario puede adquirir mayor cantidad de bienes.
En términos del PPA, en el caso de la Argentina, el salario mínimo de $ 1840 posee la misma capacidad adquisitiva que 819 dólares en los Estados Unidos, es decir, el sueldo mínimo de la Argentina permite comprar una canasta de bienes equivalente a la que se puede acceder con 819 dólares en aquel país”, indica el estudio. El ránking es liderado por Bélgica, Australia, Holanda, el Reino Unido y Luxemburgo.
De todas maneras, el estudio destacó que el piso legal aplicable al sector formal de la economía argentina “está entre los mayores del mundo y excede no sólo al resto de los países latinoamericanos sino que prácticamente iguala al de España (816 dólares PPA) y está por encima, por ejemplo, de Portugal (693 dólares PPA), Chile (428 dólares PPA) y Brasil (343 dólares PPA).
En la Argentina, el salario mínimo vital y móvil se actualiza anualmente a partir del consenso tripartito entre empresarios, trabajadores y gobierno reunidos en el Consejo del Salario, convocado por el Ministerio de Trabajo de la Nación. El año pasado, se elevó desde los $ 1500 a $ 1740 en septiembre, y luego a los actuales $ 1840 en enero de 2011. La suba del salario mínimo tiene un impacto positivo en los ingresos que perciben los trabajadores que no se encuentran alcanzados por ningún convenio colectivo de trabajo. Pero además establece un piso adicional para los trabajadores que no reciben aportes jubilatorios. Sin embargo, algunas actividades como las relacionadas con el trabajo agrario o el empleo doméstico no se encuentran alcanzadas por la suba del salario mínimo.
Según Víctor Beker, director del Centro de Nueva Economía de la Universidad de Belgrano, debe tenerse en cuenta que en el caso de la Argentina, el salario mínimo se aplica sólo a los empleos registrados, “mientras existe una importante fracción de la fuerza laboral que por estar empleada en el sector informal de la economía no está protegida por el mínimo legal y puede recibir salarios inferiores al mismo”.
Según la última Encuesta Permanente de Hogares que elabora el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, la tasa de empleo no registrado se ubica en torno al 33,7%.