Por cada suicidio, hay muchas más tentativas cada año. Cerca de 800 mil personas se suicidan cada año. A su vez, esta es la segunda causa principal de defunción en el grupo etario de 15 a 29 años.
Dentro de esta cifra, se encuentran más de 3 mil argentinos que se quitan la vida por año, alrededor de la mitad son jóvenes de entre 15 y 34 años. Según las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Argentina es el tercer país de América latina con la tasa de suicidios más alta.
Esta triste realidad muestra que muchos jóvenes no soportan seguir viviendo y recurren al suicidio a pesar de que sus vidas apenas están comenzando.
El suicidio, un fenómeno global
Según la OMS, el suicidio se da alrededor del mundo y no discrimina clases sociales, edad ni etnia:
“La ingestión de plaguicidas, el ahorcamiento y las armas de fuego son algunos de los métodos más comunes de suicidio”.
Cualquier persona que sufre depresión es una potencial suicida. Así también los personas con diferentes diagnósticos psiquiátricos, que sufren desequilibrios emocionales.
El suicidio se da a cualquier edad y tampoco se ve condicionado por la clase social.
Algunas de las razones más comunes del suicidio:
• Una gran desilusión amorosa
• Estrés
• Depresión
• Abuso de drogas o alcohol
• Causas biológicas
Finalmente, es difícil establecer las causas porque involucra diversos factores. Y se suman tambiém la vulnerabilidad en la que se encuentra la persona.
Pacto suicida
Recientemente dos jóvenes, un hombre y una mujer de 19 y 20 años fueron encontrados por la Policía Bonaerense en un auto en el cruce de las rutas 6 y 4. Dentro de este encontraron también un arma calibre 22 y bebidas alcohólicas.
Cuando los encontraron, todavía estaban con vida y fueron derivados al Hospital Zonal de Campana. Ambos tenían heridas de bala, el varón perdió la vida a las 18 horas. Ambos ingresaron con muerte cerebral.
Se cree que él le habría disparado a la joven para luego suicidarse. Según los investigadores, decidieron morir a juzgar por la carta en la que anunciaba que se quitaría la vida. El escrito de el joven decía:
“Escribo esta carta después de haber fallecido, veo el mundo y me da asco, la misma humanidad repugna. Los gobernantes que intentan que el pueblo sólo piense en el morbo, no dejan que nadie opine, pero si se equivocan la paga el pueblo…
Es totalmente asqueroso, ya nadie ama (…), no saben qué es amar… no saben qué es la familia, no saben nada. Pero eso termina acá (…), cambien, no sean ignorantes, se me acaba el tiempo y empiezo a irme de acá, espero sepan lo que hacen”.
Solo Dios puede darle el apoyo espiritual que necesita para que pueda superar el momento que está pasando. No se rinda, busque la ayuda de Dios este domingo a las 9:30 en el Templo de la Fe o en la Universal más cercana a su domicilio.
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