Muchos ven sus sueños ser interrumpidos de forma violenta, todo lo que planearon queda en el olvido. Todo lo que proyectaron fue en vano porque por diferentes circunstancias de la vida, las trágicas consecuencias terminaron destruyendo lo que más anhelaban.
El último tiroteo en un Festival de música country en Las Vegas, señalado como el peor en la historia de Estados Unidos, terminó con la vida de 58 personas y más de 500 heridos. Stephen Paddock desde el piso 32 del Hotel Mandalay Bay fue el autor de la masacre para luego terminar con su propia vida.
Cuando los disparos se silenciaron lo único que se escuchaba era los gritos y el desconcierto, porque nadie estaba preparado para lo que estaba pasando, en unos minutos, el mundo se detuvo.
Lisa Romero Muñiz y su esposo Chris habían llegado a Las Vegas para disfrutar el festejo de su aniversario. Él había preparado un fin de semana especial ya que, el año anterior, había olvidado el festejo. Chris preparó todo para que ella pudiera ver a su cantante favorito, así fue que terminaron en ese festival. Ninguno de los dos imaginó lo que sucedería ese día.
Ella era secretaria, en Gallup, nuevo México y tenía tres hijos. Pero fue una de las víctimas de esa noche. Su esposo había preparado un viaje soñado, ahora solo queda el trágico recuerdo de todo lo que nunca podrá ser. Sus hijos perdieron a su madre, su marido a una esposa y todos sus seres queridos lloran la abrupta interrupción de su vida.
Jordan McIldon, 23 años, era aprendiz de mecánico de Columbia Británica y estaba a punto de empezar a estudiar en la universidad. Estaba en el concierto de música country con su novia. Sus padres, Al y Angela, confirmaron su muerte. “Sólo teníamos un hijo”, dijeron. “No sabemos lo que vamos a hacer”. Ellos escribieron que Jordan creció en la granja de la familia en Maple Ridge y que “se describía a sí mismo como un pueblerino que vestía botas de vaquero, estaba cubierto de tatuajes y amaba la naturaleza”. Sus sueños nunca podrán realizar, todo lo que planeó para su vida ya no existe”.
Esto sucede a diario, incluso en nuestro país, padres que pierden a sus hijos de forma trágica, mujeres y hombres que pierden al amor de su vida a pesar de que soñaron una vida juntos, nada de eso será posible.
Comience de cero
El obispo Macedo en su blog señala que solo con Dios es posible superar la frustración de no haber realizado su sueño: “¿Cuánto tiempo hace que usted está conviviendo con el mismo problema? Esa situación que le quita su sueño, su paz, su dinero. ¿Hace cuántos años usted gasta energía en resolver algo? Pero todo parece empeorar.
Hoy, a los 20, 30, 40, 50 años o más, usted mira hacia atrás y solo logra ver una vida de sufrimientos y luchas. Son muchos los esfuerzos para alcanzar algunos momentos de felicidad, pero que parecen haber sido borrados por tantas decepciones y frustraciones a lo largo de su trayectoria.
La vida pasa en un abrir y cerrar de ojos. Son varias horas de trabajo, en el tránsito, en filas, en las redes sociales, horas perdidas. Y usted, ¿qué ha hecho con los 1440 minutos de su día? ¿Con los 7 días de su semana? ¿Con las 52 semanas de cada año?
El tiempo está pasando y terminando con su ánimo, su juventud y sus proyectos. Ya estamos llegando al final del 2017, pero nada salió como usted lo planeó. Es momento de que recurra a la fe sobrenatural para lograr lo que durante años fue imposible, acérquese al Templo de la Fe o a la Universal más cercana a su domicilio.
[related-content]