En medio de las dificultades parece imposible salir adelante, sin embargo, si observamos la vida de Abraham notamos que él resplandecía en su tiempo. Él era bien visto por todos porque tenía una conducta intachable y un matrimonio sólido. Sus siervos lo servían de buena gana y él prosperaba aun antes de tener un heredero. Sus contemporáneos se dedicaban a observar sus obras para saber quién era su Dios.
Así debe suceder en la vida de quienes recurren a Dios para prosperar, porque su éxito es notorio delante de todos. No hace falta que él diga nada, su conducta, su determinación hablan primero y demuestran el carácter de quien tiene un socio Todopoderoso. Así, nuestra luz tiene que resplandecer para que todos puedan verla.
En el Congreso para el Progreso se enseña que las mismas bendiciones que alcanzó Abraham pueden ser alcanzadas por cualquier persona. Lunes tras lunes usted tiene la posibilidad de aprender a tener esa visión para conquistar una vida bendecida.
Participe del Congreso para el Progreso este lunes a las 8, 10, 12, 16 y especialmente a las 20 h en Av. Corrientes 4070, Almagro y venza la adversidad. Una vida completa está a su alcance.
Ellos tomaron una decisión y prosperaron
Elba: “Tuve que hacerme cargo de la deuda de un familiar y eso complicó mi situación económica porque no podía cubrirla.
Determiné en el Congreso para el Progreso que la iba a pagar y de hecho la estaba pagando, un día fui a la casa central y me notificaron que la deuda estaba cancelada”.
Elisa: “Mi esposo y yo llegamos desempleados, estábamos en la miseria, pero participamos del Congreso para el Progreso y conseguimos un empleo, logramos cancelar una deuda de un terreno y estamos por edificar”.
Matías: “No lograba quedar efectivo en ningún trabajo. Empecé a participar del Congreso para el Progreso y tomé la decisión de abrir mi propio negocio. Con mi esposa tenemos una parrilla que crece día a día”.
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