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La misericordia de Dios hacia los individuos condenados, no anula el poder de legislar y condenar, otorgado a las autoridades del gobierno

Varias investigaciones comprueban las ventajas de su consumo moderado

Un especialista opina que ese sentimiento es capaz de ayudar a madurar y dar comienzo a la admiración por el otro

Hay quien dice que Dios está distante, que lo olvidó. Existen aquellos que aseguran que no logran vivir según Sus preceptos, “es mejor vivir así, sin…

Dignidad en la búsqueda de reconciliación y paz

¿Cómo proceder en la fiesta de Navidad ante familiares incrédulos? ¿Debo participar? Pues no me gustaría. – Lu Cardoso Respuesta: Lu, si no le gustaría, entonces está en su derecho de no participar – ya sea Navidad, Año Nuevo, o cualquier otra fiesta social. Pero si su pregunta es: “¿Está mal si yo no participo? ¿Tengo la obligación de estar allí porque son mis parientes?”Vamos a pensar sobre eso. Para una persona que piensa, celebrar la Navidad es una agresión a su inteligencia. No es ni por una cuestión religiosa, sino por lógica. Por lo tanto, en la práctica puede ser bien difícil participar de algo que usted no cree. Por ejemplo, ¿usted debe comprar regalos de Navidad para un ser querido en la fiesta? Y si alguien le da uno, ¿lo va a aceptar? Y cuándo le deseen “Feliz Navidad”, ¿usted le deseará lo mismo? Es complicado. Por lo mínimo sería hipócrita. Mi consejo: lo mejor es no participar. Por otro lado, ¿es pecado usted estar con su familia, cenar juntos, hablar? Por supuesto que no. Tal vez sea la única vez en el año que su familia se reúne. Si usted no participa, puede causar problemas con aquellos que no entenderán su posición. Por ejemplo, ¿como una esposa explicará a su esposo, el cual ama la Navidad, que ella no participará con él ni hará nada para la fiesta? Seguramente se buscará un problema. En este caso, usted puede decidir participar y ver la ocasión como un evento familiar. Tratará de no participar directamente en las actividades navideñas, pero estará allí presente por respeto y consideración a la familia. Por lo tanto, es una cuestión de fe. Cada uno debe actuar de acuerdo a su fe y lo que su conciencia aprueba, sin perjudicar la Palabra de Dios. No me refiero a aquellas “fiestas” donde la Navidad es sólo una excusa para emborracharse, hacer bromas, y otro tipo de cosas que cualquier persona de buen sentido no debería hacer parte, sea la fecha que sea. [related_posts limit=”5″]

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