La modelo australiana Cassi Van Den Dungen no está satisfecha con sus seguidores en Instagram. El disgusto es tan grande que ha escrito: “¡Todos ustedes apestan!”
Todo esto se debió a que una imagen publicada por Cassi “solo” tuvo “14 Me gusta”. “La cantidad más baja que tuve alguna vez en Instagram. Debo decir que estoy bastante shockeada…”, declaró.
El mensaje se refería a la satisfacción de aventurarse y, en la visión de la modelo, el hecho de que las personas no les hayan puesto “Me gusta” a su publicación significaba lo siguiente: “… esto significa para mí que a la gente A) No le gusta que tenga nuevas aventuras, como si no me fuera permitido divertirme, o B) Significa que a la gente no le gusta las nuevas aventuras… De cualquier forma, a todos aquellos que no les gustó mi publicación, y no les gusta divertirse… ¡¡¡TODOS USTEDES APESTAN!!! Las aventuras son divertidas, y disfrutaré cada una que tenga. Y para las 14 personas que sí les gustó mi publicación… WOOOW!!! ¡¡¡Que vengan nuevas aventuras!!!”
Por la cabeza de la modelo no pasó que simplemente nadie es obligado a ponerle “Me gusta” a todo lo que ella publica, y que eso no hace que sus “aventuras” sean menos reales.
“Amistad” solo virtual
No es raro encontrar perfiles de personas que ya fallecieron aún activos en las redes sociales. Es curioso observar que en los timelines (En twitter, por ejemplo, el timeline es la lista de tweets que publican los usuarios por orden cronológico) de estas personas, cientos de “amigos” envían mensajes sin saber del fallecimiento, especialmente en fechas festivas como Navidad, Año Nuevo y cumpleaños.
En estos casos, las “meteduras de pata” llueven: “¡Felicidades, le deseo mucha salud!”; “¡Que este año sea muy feliz!”; “¡Muchos años de vida!”.
Personas que ya no están entre nosotros reciben mensajes de sus “amigos” que, evidentemente, no eran amigos de verdad.
Pero si las personas no se conocen, no tienen ninguna relación razonable para saber, por lo menos, si la persona está viva, entonces, ¿por qué añadirla a una red social?
“Este comportamiento revela rastros de narcisismo personal”, responde la investigación publicada en el Computers in Human Behavior, periódico especializado en el análisis del uso de las tecnologías bajo el punto de vista psicológico.
De acuerdo con el estudio, las personas que agregan a (casi) desconocidos en sus listas de amigos, no conversan con estas personas y envían la clase de mensaje citado anteriormente, hacen esto porque necesitan aprobación. Así como quien actúa igual a Cassi Van Den Dungen.
Sufre de narcisismo la persona que se juzga ser más importante de lo que realmente es, necesita una constante admiración y aprobación de los demás. Bajo este punto de vista, es comprensible que la modelo se haya ofendido al obtener solo “14 Me gusta”. Para ella, eso significa ser reprobada por sus seguidores, algo doloroso de aceptar.
¿Quién aprueba a quién?
El que se preocupa por ser aprobado por otras personas, casi nunca se preocupa en ser aprobado por Aquel que realmente importa. El apóstol Pablo afirmó en su carta a los Gálatas: “Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.” (Gálatas 1:10)
Por lo tanto, es necesario reflexionar antes de dedicarse a la vida online. “No envíe solicitudes de amistad solo para coleccionar números, no necesita tener 1 millón de amigos para ser querido”, sugiere la consejera Núbia Siqueira en el sitio web de Obreros Universal.
[related_posts limit=”17″]