¡Buen día, obispo!
Le envío el relato de la señora Elisabeth sobre su experiencia al visitar el Templo de Salomón. Ella es de Pakistán y es ex musulmana. Desde el día en el que tomó la decisión de seguir a Jesús, fue rechazada por su familia, al punto de ser amenazada de muerte en el caso de que volviera a pisar su país. A continuación:
Mi nombre es Elisabeth y esta es mi segunda visita al Templo de Salomón. Lo que encontré en estos días fue la maravillosa Presencia de Dios.
Todo el trabajo que fue hecho en este Templo glorifica a Dios completamente. Todas las personas que quieren algo más con Dios deben visitar el Templo, pues es una oportunidad en nuestra vida de encontrar y conocer a Dios en este lugar santo.
Mientras estamos aquí, la comunión es continua, no conocemos a quién está sentado a nuestra izquierda o derecha, pero no nos interesa, porque sabemos Quién está adelante.
Logré oír y entender a Dios hablándome claramente, y sintiéndome más fuerte espiritualmente.
En este Templo se encuentra el mismo poder de la época de Moisés cuando fue a liberar al pueblo, y yo misma fui liberada y transformada. Anduve completamente perdida durante 10 años, pero un día en el Templo restauró todos los años perdidos.
Todos los que vienen al Templo pueden ser restaurados al instante, no existen palabras para explicarlo, pero tenemos un canal abierto de comunicación con Dios, hablamos y somos respondidos de inmediato.
Aquí recibí de Dios la certeza de que mi futuro está en Sus manos. Ahora sé cómo actuar delante de los problemas, pues estoy restaurada, completa y puedo hablar con él fácilmente, porque incluso las palabras que salen de mi boca son puestas por el Espíritu Santo. Llevo dentro de mí las siguientes palabras: ‘Tú debes ser santa, separada; porque Yo soy Santo.’ Es una experiencia maravillosa, no hay dinero que lo pague.
Pastor Marcos – Luxemburgo
Obs: Para mayores informaciones sobre el Templo de Salomón, acceda a la página