Existen problemas con los que convivimos habitualmente y dan la impresión de que la solución es algo externo o que depende de terceros, sin embargo, es necesaria la contribución de cada uno para solucionar estos problemas porque en esta época del año parecen cobrar mayor relevancia.
Sin dudas, la descomposición de residuos es un tema que nos preocupa durante todo el año, principalmente durante el verano, y esto se debe a que las altas temperaturas aceleran los procesos de descomposición, entonces el olor desagradable se hace sentir en las calles.
Habrán notado que la basura en casi todas las ciudades huele de manera similar y se preguntarán porqué. Esto se debe a que el olor está dado no por los desechos en sí mismos, sino por las bacterias que se encargan de la descomposición de la materia, que en casi todos los lugares suelen ser las mismas.
La acción de microrganismos genera vapores como el dióxido de carbono, ácido propílico, que parece queso pasado, sulfuro de hidrógeno, que huele como huevo podrido, ácido butírico, con un aroma a manteca rancia, ácido acético, el característico olor a vinagre, amoníaco y tolueno. Todos estos efluentes se desprenden de materia orgánica, que generalmente proviene de la comida.
Una forma de contribuir a evitar el mal olor es sacar nuestra basura en los horarios adecuados, generalmente, se solicita que se haga cuando anochece (alrededor de las 20 horas) justamente para evitar que se exponga en los contenedores a altas temperaturas que favorecen la fermentación, y que esté allí alojada durante la menor cantidad de tiempo posible.
Lamentablemente, en nuestro país, como en muchas otras partes del mundo todavía no existe una política clara acerca de qué debe hacerse con los desechos que producen los seres humanos, y que van aumentando exponencialmente, producto de una sociedad que genera cada vez más elementos descartables.
No obstante, existen proyectos interesantes para la producción de combustible derivados de residuos y reciclado de materiales diversos esto es a partir de desechos industriales y domésticos, esto permitiría reducir la cantidad de residuos que van a rellenos sanitarios, que es un grave problema que existe en los grandes centros urbanos; además sería una importante contribución para disminuir la cantidad de combustibles derivados de hidrocarburos, que son escasos y su obtención es altamente contaminante.
Cuidar de nuestro ambiente y hacerlo sustentable es responsabilidad de cada uno de nosotros, es pensar en el prójimo y, también, en las generaciones futuras.
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