El último domingo, en la sede nacional de la IURD de Montevideo, capital de Uruguay, fue muy movido, en lo que respecta al fortalecimiento de la fe de los fieles, presentes a lo largo del día, en varios eventos.
Por la mañana, la reunión “Mi Familia en el Altar de Dios” fue inolvidable para todos aquellos que con sus familiares, tuvieron una renovación de sus lazos bajo la protección del Señor Jesús. La iglesia quedó pequeña ante tanta gente feliz.
Otra reunión especial que hizo que el templo quedara chico fue la primera consagración de todas las educadoras de la Escuelita Bíblica Infantojuvenil (EBI) del país. El pastor Eduardo Verrone, responsable de la IURD uruguaya, habló sobre la importancia de las educadoras, que trabajan con toda la dedicación y buena voluntad en la enseñanza de la Palabra de Dios a los niños. El pastor consideró que, muchas veces, los niños pasan por los mismos problemas que los padres, que los afectan de manera diferente que a los adultos. En ese punto es que entra parte importante del trabajo de las educadoras, que enseñan desde temprano a los pequeños las bases para una vida espiritual digna, en un trabajo hecho día tras día.
Vanessa Barbosa, responsable de la EBI en Uruguay, entregó a cada educadora un diploma.
En el Templo de Salomón
Días antes, el martes, el pastor Julio estuvo en el vecino Brasil, en las obras del Templo de Salomón, en San Pablo.
Él aprovechó la oportunidad para llevar los pedidos de los fieles uruguayos a la obra, donde pudo ver el gran equipo de construcción y las grandes grúas en funcionamiento.