Mi verdad
Este fue el tema de nuestra última reunión del Godllywood Autoayuda. A continuación, te dejamos un resumen de lo que se habló. Y si no estuviste presente, ¡te esperamos en la próxima!
Podemos creer en nuestra propia verdad, formada por distintas situaciones que nos llevaron a aceptar ciertas opiniones como “verdaderas”, o podemos vivir según la Verdad de Dios.
Primero tenemos que identificar cuáles son nuestras verdades y de dónde vienen. Muchas veces pensamos que el problema es solo exterior, cuando, en realidad, el mayor problema está dentro de nosotras.
Cuando creemos en algo, tendemos a vivir conforme a esa creencia; sin embargo, no siempre esa creencia es verdadera. Existen distintas situaciones que nos hacen asumir “verdades” que realmente no lo son y, lamentablemente, esto se refleja en nuestras actitudes. A continuación, te mostramos algunas situaciones:
- Lo que veo: Nos dejamos llevar por lo que vemos y no razonamos según la Palabra de Dios.
- Lo que viví: Las malas experiencias nos hacen asumir ciertas creencias como verdaderas.
- Lo que guardé: Situaciones, palabras… Cuando conservamos algo en nuestro interior, es porque lo consideramos algo importante.
- Lo que espero: Muchas veces tomamos decisiones sin pensar en lo que Dios espera de nosotras.
- Mi voluntad: Nuestra voluntad no siempre acepta la de Dios, que muchas veces nos contradice.
¿Te considerás una persona negativa, triste, o que piensa que nunca logrará nada en su vida? ¿Ya pensaste de dónde vienen tus pensamientos? ¿Tus comportamientos revelan lo que guardás en tu interior?
Todas estas situaciones pueden afectarnos y, en consecuencia, influir en nuestras actitudes. Pero, todo depende de la decisión que tomemos. Con respecto a este tema, el Señor Jesús dijo algo muy interesante:
“Jesús le dijo: Yo Soy el Camino, y la Verdad, y la Vida; nadie viene al Padre sino por Mí”. Juan 14:6
Jesús dijo que Él es la Verdad. Ahora, reflexionemos:
¿Nuestras verdades se contradicen con la Palabra de Dios? Si por actuar según nuestras verdades, no obtuvimos los resultados que esperábamos, eso significa que hacer las
cosas a nuestra manera no sirve de nada. ¿Esto nos contradice? ¡Claro que sí! Pero, esta verdad es la que nos libera y bendice.
“El que tiene Mis mandamientos y los guarda, ese es el que Me ama; y el que Me ama será amado por Mi Padre; y Yo lo amaré y Me manifestaré a él”. Juan 14:21
En esta Palabra, Jesús nos revela lo que realmente tenemos que guardar en nuestro interior y las consecuencias de hacerlo. Vos decidís: ¿serás esclava de tus propias opiniones o aceptarás la Verdad que te presenta el Señor Jesús?