Sergio estaba fuera de sí tomó un palo en sus manos se acercó gritando a su esposa, y comezó a golpearla, no podía controlarse. Sentía que no era él, desde los 18 años sufría por su adicción a las drogas y al alcohol. Aunque intentaba calmarse, no lo lograba y seguía castigando a la mujer que maba. No podía evitar sentirse miserable, pero no podía detenerse. Finalmente se detuvo, cuando ella cayó desmayada en el suelo, con el tabique roto las piernas golpeadas y la cara irreconocible.
Su angustia era inmensa, le rogaba que se despierte, que vuelva en sí, pero ella no reaccionaba, Sergio había tocado fondo, sentía que no había esperanzas para él. Su hermano al enterarse de la situación le hizo una invitación, aunque Sergio no estaba seguro de nada, sabía que su vida estaba destruida que sólo Dios podía ayudarlo…
Este viernes a las 8, 10, 12, 16 y 20 toque el Manto Consagrado y sea libre del sufrimiento que lo agobia. Lo esperamos en Av. Corrientes 4070 Almagro. También puede buscar un Cenaculo más cerca de su hogar haciendo clic aquí