Luis: “Sufría un problema en la cervical, lo tuve aproximadamente 10 años. En consecuencia, no lograba mantenerme parado por mucho tiempo.
Trabajaba, pero había días en los que no podía más. A veces, al despertar a la mañana, no lograba levantarme, sentía mareos y me caía. Toqué el Manto de Poder y en ese momento, fui sanado, no volví a marearme gracias a Dios”.
Luisa experimentó el poder de Dios: “Al tocar el Manto me curé de todo. En ese momento sufría depresión y hemorragias. Estuve deprimida y realmente mal durante 20 años.
La primera vez que toqué el Manto, tenía una mancha en la cara y se me fue, estaba muy contenta. Después participé de las reuniones de los viernes y ahora me siento bien. Gracias a Dios estoy completamente curada”.
Mercedes: “Yo vine a pedir por mi hermana que tenía un tumor terminal en los ovarios. Tanto así que sus hijos estaban preparados para el final de su vida. Al día siguiente, la llamé y dijo que no aguantaba el dolor y decidió ir al médico.
La misma tarde me llamó llorando: ‘estoy entrando al cuarto mes de embarazo’. Es increíble, gracias a Dios, el tumor desapareció y ella tuvo una nena”.
Norma: “Yo pensé que tenía hemorroides y fui al médico. En la consulta, me hizo un estudio y descubrió que era cáncer de colon. Este era el que me producía dolores, ardor, picazón y sangrado. Me había quedado sin cabello, sin fuerzas y estaba demasiado flaca.
Gracias a Dios, toqué el Manto los viernes, hice las Cadenas de oración, me fui recuperando hasta que me curé”.
Viernes a las 8, 10, 12, 16 y principalmente a las 20 h en Av. Corrientes 4070, Almagro o haga clic aquí y vea la dirección de la iglesia más cercana a su hogar.
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