“Gracias a Dios, no tengo más depresión”
Lina: “estaba sufriendo un pico depresivo a causa del fallecimiento de mi esposo. Era demasiado el dolor que sentía, ya ni me bañaba, ni comía y estaba encerrada. Hasta que me invitaron y llegué a esta reunión de liberación. Hoy me encuentro en paz y tranquila. Gracias a Dios, no tengo más depresión”.
Su hija estaba desahuciada, pero recibió un milagro
A la hija de Serena le habían diagnosticado cáncer, pero ella activó su fe: “mi hija tenía linfoma de Hodgkin y tuberculosis en el pulmón izquierdo. Le hicieron quimioterapia, pero no le daban la certeza de que fuera a vivir, la desahuciaron. Sin embargo, Dios hizo un milagro tan grande que los médicos no lo podían entender”.
Fue libre de los pensamientos de suicidio
“No podía dormir, tenía pensamientos de suicidio y depresión. Consumía marihuana y era muy agresiva con mi familia. Hice la cadena de liberación y hoy, gracias a Dios, soy libre de todos los problemas que tenía. Ya no tengo depresión, ni insomnio y dejé la marihuana. Soy otra persona, con ganas de vivir”.
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