Finalmente, la noche tan esperada llegó. De diferentes puntos de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, alrededor de 3000 obreros se acercaron a la Universal de Av. Corrientes 4070 para que cerca de la medianoche diera comienzo la vigilia.
El propósito estuvo basado en lo que la Biblia dice en Josué 5:13-15: “Estando Josué cerca de Jericó, alzó sus ojos y vio un varón que estaba delante de él, el cual tenía una espada desenvainada en su mano. Y Josué, yendo hacia él, le dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos.
El respondió: No; mas como Príncipe del ejército del Señor he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró; y le dijo: ¿Qué dice mi Señor a su siervo?
Y el Príncipe del ejército del Señor respondió a Josué: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás es santo. Y Josué así lo hizo.”. Para que Dios pudiera hablar con él, Josué primero tuvo que quitarse sus sandalias, que simbolizan el miedo, la duda y todo aquello que impide la correcta comunicación y relación con Dios. Luego de haber hecho esto, Josué recibió la profecía sobre la caída de las murallas de Jericó.
Así, el pastor Ronaldo exhortó a los obreros a quitar las sandalias espirituales que impedían su comunión con Dios. Luego, todos buscaron el fortalecimiento que viene del Espíritu Santo y renovaron sus votos de servir a Dios.
Finalmente, cerca de las 4 de la madrugada, todos volvieron a sus hogares llenos de fuerzas y ya sin nada que los separara de la presencia de Dios.
[fotos foto=”Cedidas / El Universal”]
[related_posts limit=”5″]