Cisjordania es una región de Israel reivindicada por la Autoridad Nacional Palestina (organización administrativa autónoma que gobierna transitoriamente desde 1994 en la Franja de Gaza y parte de Cisjordania) y por Jordania, ubicada en la margen del Río Jordán. Formó parte de la Palestina Histórica hasta 1948, junto a lo que es, hoy, el Estado de Israel y la Franja de Gaza. Cisjordania y Gaza integrarían un Estado Palestino, de acuerdo a la famosa resolución de las Naciones Unidas de 1947. No obstante, en 1967, las dos áreas habían sido ocupadas por Israel después de la Guerra de los Seis Días.
Pasado ese hecho, algunas partes de las dos áreas comenzaron a ser administradas por la Autoridad Nacional Palestina. Aunque Israel, aun en la actualidad, las controle militarmente, inclusive a través de la construcción de un alto muro (foto) que la aísla – con más de 700 quilómetros de extensión –, y que deja en su interior a más de 160 mil familias palestinas. En este territorio se encuentran importantes ciudades de la Biblia, como Belén (foto), la tierra natal de Cristo.
La población cuenta con 2,5 millones de habitantes aproximadamente. Entre ellos, cerca de 364 mil judíos. La mayoría de los árabes es musulmana sunita, en contraste con una minoría cristiana. La lengua árabe es la más hablada, le siguen el hebreo y el inglés.
Lugares bíblicos
En la región, se encuentran lugares que están entre los más sagrados del mundo para el cristianismo, el judaísmo y el islamismo.
En Hebrón, una de las cuatro ciudades sagradas para los judíos, se encuentra la Gruta de Macpela, donde están los túmulos de tres de los mayores patriarcas de la historia bíblica: Abraham, Isaac y Jacob, con sus respectivas esposas. En Génesis 23 se menciona la compra del terreno por parte de Abraham quien quiso enterrar allí a su mujer. Sucesivamente, se describe dentro de Génesis, en los versículos 25:7, 35:27 y lo confirma Jacob en Génesis 49:29. La cueva de Macpela, en Hebrón, fue el lugar elegido para la tumba de estos tres patriarcas. Hoy se encuentran dentro de una mezquita árabe, donde el acceso es libre, pero estrictamente controlado.
Jericó, la ciudad ocupada por los hebreos después que hubieran cruzado el Río Jordán y tomado la Tierra Prometida, fue el escenario de la famosa batalla donde las murallas fueron derribadas por las tropas lideradas por Josué (como está descrito en el capítulo 6, en el libro bíblico de su autoría). Sobre el límite de la ciudad, puede visitarse también el Monte de la Tentación (foto), donde Jesús fue tentado por el diablo: “lo llevó el diablo a un monte muy alto” Mateo 4:8.
Y Belén, una de las ciudades más importantes del planeta, históricamente, por haber sido la tierra natal del propio Jesucristo. Cerca a esta última, en el camino que la une con Jerusalén, está el túmulo de otro importante personaje bíblico: Raquel, esposa de Jacob, como está narrado en Génesis 35:16.
A pesar de los violentos enfrentamientos locales, la región es visitada por turistas aunque deban someterse a los checkpoints (pasajes vigilados) de las fuerzas israelitas, en diferentes partes de la ciudad. Si la documentación estuviera en orden, no encontrarán problemas.