Este domingo 13 de octubre, en el Templo de la Fe y en todas las Universal, se llevará a cabo el cierre del propósito del “Ayuno de Daniel”. Este evento será “La gran fiesta del Espíritu Santo”.
¿Qué fue el “Ayuno de Daniel”?
A lo largo de este periodo, aquellos que participaron se desconectaron de las informaciones de este mundo para involucrarse con la presencia de Dios.
El 18 de septiembre, el obispo Edir Macedo explicó en su blog lo siguiente: “Este ayuno será un tratamiento espiritual. Dejaremos, durante 21 días, las cosas seculares de esta vida, de este mundo, y enfocaremos nuestro pensamiento, nuestra mente, 100% en aquello que Dios ha dicho en Su Palabra. Quien quiera beber del Agua que Jesús quiere dar, va a hacer este sacrificio de dejar las redes sociales, shopping, cine, teatro, novelas y todo lo que no tiene nada que ver con la fe en el Señor Jesús”.
Un gran evento bíblico
Este propósito especial se realiza con el objetivo de ayudar a las personas a buscar el bautismo en el Espíritu Santo, al igual que los discípulos del Señor Jesús en el “Día del Pentecostés”.
“Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.” Hechos 2:1-4
En el libro El Espíritu Santo, el obispo Edir Macedo también aclara: “[…] Cuando alguien es bautizado con el Espíritu Santo recibe inmediatamente poder para servir como instrumento en Sus manos; también para servir como testimonio de la resurrección del Señor Jesús no solo en el sentido de hablar de lo que está escrito en la Palabra de Dios, sino de ser como el propio Señor Jesús: un testimonio vivo de alguien vivo”.
Encuentro especial
El cierre del “Ayuno de Daniel” sucederá en esta misma fe. Por lo tanto, participe de la oración especial que se realizará. Si usted también desea tener el Espíritu Santo en su vida, entréguese verdaderamente a Él. No se pierda esta oportunidad.
A pesar de que el propósito haya terminado, usted puede seguir absteniéndose de lo que este mundo le ofrece para permanecer en el Reino de Dios.
