El próximo 6 de agosto, comenzará en todas las Universal, el propósito especial, el Ayuno de Daniel. Serán 21 días de abstención del mundo secular para que podamos pensar solo en el Reino de Dios. “Usted se dedicará más a la lectura de la Biblia, a ir más seguido a la iglesia, a ver el contenido que ofrece la plataforma Univer Video y las novelas bíblicas. Usted renunciará al cine, a los deportes, a los lugares de recreación o a cualquier cosa que suele hacer, que no tenga nada que ver con las cosas de Dios”, explicó el obispo Edir Macedo.
El objetivo de esto es que los participantes sean bautizados en el Espíritu Santo y aquellos que ya Lo tienen reafirmen esta alianza. Cuando el Señor Jesús resucitó, les dijo a los discípulos que dejaría el Espíritu Santo para que nos cuidara (Juan 14:26-17). Por esta razón, es muy importante que tengamos la conciencia de recibirlo en nuestras vidas.
1- “Si fueres flojo en el día de trabajo, tu fuerza será reducida.” Proverbios 24:10
La persona que no tiene el Espíritu Santo es frustrada, siente un vacío interior y no vive la plena paz. Cuando los problemas aparecen, ella quiere actuar con la “fuerza de su brazo” y se ve afectada emocionalmente. La fuerza de los hijos de Dios viene de Su Espíritu, que promueve amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fe, mansedumbre y dominio propio.
2- “…porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra.” Santiago 1:6
La duda es el instrumento del diablo para destruir la fe de los que creen en Dios. La persona que acepta las dudas lanzadas por los espíritus malignos se frena en medio del camino. No llega al objetivo, que es la Salvación Eterna. El mal logra manipularla con facilidad, tirando a la persona de un lado al otro. El Espíritu Santo, por otro lado, produce conciencia y arrepentimiento, conduciendo al individuo en el sentido correcto por medio de la fe.
3- “Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas.” Lucas 10:41
Lo único necesario es el Reino de Dios. Quien recibe el Espíritu Santo es la propia bendición y, por eso, no vive corriendo detrás de bendiciones. Para esta persona no importa casarse o enriquecerse, por ejemplo. Ella vive en plenitud, porque el Autor de la vida está dentro de ella. Sin embargo, quien no tiene el Espíritu Santo solo logra ver las conquistas de este mundo y pierde la fe en cuanto no logra alcanzarlas.
4- “Perversidades hay en su corazón; anda pensando el mal en todo tiempo; siembra las discordias.” Proverbios 6:14
La persona que no tiene el Espíritu Santo es inestable emocionalmente, es muy sensible, difícil de tratar, no sabe perdonar y cultiva rencor, es chismosa y maliciosa. Quien tiene el Espíritu del Creador, al contrario, tiene Su naturaleza. Su corazón es puro y sus pensamientos conducen a la justicia.
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