La Biblia no desampara al cristiano en ninguna circunstancia. Cualquiera que fuera la duda o la situación por la que alguien esté pasando, la Palabra de Dios tiene la orientación correcta. Hoy, el Portal Universal.org lista 5 lecciones bíblicas que le ayudarán a crecer profesionalmente.
1 – No se conforme
Es natural que algunas personas, después de cierto tiempo en una misma empresa o ejerciendo la misma función, se acomoden. Sin embargo, la Biblia deja en claro que solo los que siguen evolucionando pueden experimentar la bondad de Dios. No se convierta en una piedra inmóvil en su zona de confort. Siempre busque mejorar, alcanzar otros niveles.
“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.” (Romanos 12:2)
2 – Aprenda de las críticas
El orgullo y la vanidad, muchas veces, impiden que el trabajador aprenda. Eso porque es difícil para algunos escuchar críticas, a pesar de merecerlas. “El que ama la instrucción ama la sabiduría; mas el que aborrece la reprensión es ignorante.” Este es el Proverbio del capítulo 12 versículo 1, y en el primer versículo del capítulo 13, la lección se refuerza: “El hijo sabio recibe el consejo del padre; mas el burlador no escucha las reprensiones.”
Acepte ser disciplinado, aprenda a oír las críticas y a trabajar en sus defectos para que, en el futuro, usted sea un mejor empleado y aprenda a aprovechar las oportunidades ofrecidas.
3 – No tenga enemigos
“¿Tomará el hombre fuego en su seno sin que sus vestidos ardan?” (Proverbios 6:27)
Cada vez que, con rabia, piense en alguien, recuerde esta pregunta. ¿Quién puede cargar en su pecho la enemistad, el rencor, sin que eso trabe su desempeño y desarrollo? Nadie es capaz de cultivar enemistades y, también, ejercer un buen trabajo. Manténgase atento, deje los rencores atrás, ellos no le traerán beneficios.
4 – Por hoy viva el hoy
Guardar rencor es sufrir el pasado dos veces, ser ansioso es sufrir por el futuro dos veces, y peor aún, es sufrir por lo que no se conoce el resultado. ¿Cómo alguien puede trabajar en paz o desempeñar un buen papel si está tratando de adivinar el futuro, angustiándose por lo que vendrá? Imposible.
“¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?” (Mateo 6:27)
Nadie.
“Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.”(Mateo 6:34)
Trabaje el hoy y en el hoy.
5 – Lo más importante
El último consejo -pero no menos importante- usted ya conoce y ya ha visto la opinión del obispo Renato Cardoso sobre la pereza:
El que no planta no puede cosechar. Si es así con todos los demás, ¿qué le hace pensar que con usted será diferente? El que no trabaja, no obtiene resultados.
“El deseo del perezoso le mata, porque sus manos no quieren trabajar.” (Proverbios 21:25)
Aunque usted siga los cuatro consejos anteriores, si fuere perezoso no conquistará nada.
¿Quiere conocer las actitudes bíblicas que les enseñan a los emprendedores a vencer? Haga click aquí y vea cuales son.
[related_posts limit=”17″]