6° LUGAR: Por un mal testimonio de algunas personas.
El mal testimonio de una persona, especialmente de alguien que se identifica como «Miembro”, “Evangelista”, “Colaborador”, “Obrero», puede ser perjudicial para la fe de quien no es Bautizado con el Espíritu Santo o no tiene madurez espiritual. Sus acciones y actitudes reflejan lo que hay en su interior, y esto puede hacer que otra persona se aleje de la Iglesia–Casa de Dios.
Una persona puede estar participando en las Reuniones Prácticas e Inteligentes de la Universal, pero no haber priorizado nunca ser un verdadero hijo de Dios, y por esa razón algunos han mirado y han acabado viendo incoherencia, hipocresía o actitudes negativas en quienes dicen ser de Dios, un comportamiento contrario que puede hacer que alguien se sienta decepcionado o desmotivado.
- Desilusión y decepción: Si alguien ve que una persona que dice ser de Dios actúa con hipocresía, falta de amor al prójimo o injusticia, puede sentirse traicionado y perder la confianza en la fe.
- Escándalo y tropiezo: Jesús advirtió sobre ser piedra de tropiezo para otros (Mateo 18:6). Un mal testimonio puede hacer que alguien dude de la autenticidad del Evangelio. El Propio Señor Jesús también Afirmó que los escándalos son inevitables, sin embargo no debemos causarlos. Otra cosa relevante es que los escándalos siempre serán una realidad en la caminata cristiana de quienes siguen al Señor Jesús.
- Falta de inspiración: El buen testimonio motiva a otros a acercarse a Dios, mientras que el mal testimonio puede desanimar. Cuando no busco dar un Buen Testimonio {Carácter} y tener un Testimonio {Superaciones, Madurez espiritual} que glorifique a Dios, esto puede alejar a las personas de buscarLo.
Sin embargo, es importante recordar que la fe debe estar basada en la Palabra de Dios, y no en las fallas humanas de otras personas, aunque sean Oficiales de la Iglesia. Aunque los malos ejemplos pueden afectar, cada persona es responsable de su Relación con Dios. No puedo dar excusas diciendo que me desanimé o abandoné la Fe por nada ni por nadie.
“Hermanos, sed imitadores míos, y observad a los que andan según el ejemplo que tenéis en nosotros. Porque muchos andan como os he dicho muchas veces, y ahora os lo digo aun llorando, que son enemigos de la Cruz de Cristo”. Filipenses 3:17-18
Quien prioriza ser amigo del Señor Jesús, no se dejar desmotivar por los ejemplos de los que se hacen enemigos de la Cruz de Cristo.
Obispo Júlio Freitas
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