¿Quién no escuchó alguna vez que el ser humano siempre está insatisfecho? Muchas veces, esta actitud se hace evidente en la vida profesional, por las elecciones que se realizan en esta área.
Por lo que se ve, la gran mayoría de las personas nunca se siente realizada con el empleo que tiene y siempre reclaman sobre algo que podría ser diferente, como la estructura de la empresa, el salario, el jefe (que no ve sus cualidades profesionales) o sobre el compañero que no hace nada y que le deja todo el trabajo pesado a los demás.
Varias veces, vemos que muchos trabajan sin ganas y le demuestran eso a los clientes o al público en general y solo esperan los beneficios, como el fin de semana libre, las vacaciones o el pago del bono anual.
¿Qué es lo importante?
Para Sandra Oliveira, coach de una empresa, aunque la cuestión salarial sea importante, la persona debe tener un propósito profesional para ser más feliz: ” Y ese es el motivo que la impulsa y hace con que ella desempeñe su actividad con competencia. Y, si ella tiene autonomía para realizarla, con espacio para pensar y actuar conforme a aquello que cree, será mejor todavía. Cuando eso se tiene en cuenta, ella se siente más satisfecha”, dice.
Pero, para la especialista, eso depende mucho de la actitud del trabajador en relación a su trabajo y a lo que desea conseguir dentro de la empresa.
“Tiene relación con el modo como usted lidia con su profesión y lo que usted hace para que su trabajo sea reconocido de manera eficaz. Son actitudes relacionadas a la búsqueda de conocimiento y a como usted atiende a sus clientes, por ejemplo. Las acciones dependen únicamente de usted”, explica.
Esté atento
El analista de cobranzas Davi Maciel de Martin, de 37 años, trabaja en una institución financiera y pone siempre como prioridad atender esta necesidad para sentirse bien en el trabajo y producir mejor. “Busco trabajar con excelencia en mi actividad y no dejo de hacer networking (la traducción literal sería “trabajar tu red de contactos”). Sé que los profesionales que están en el mercado tienen ventaja sobre los desempleados. Es como si fuera una vitrina más atractiva”.
La actitud de Davi es un ejemplo a seguir en cualquier tipo de trabajo. Muchas veces, los profesionales están estancados o sin perspectivas porque no buscan cambiar su conducta y esperan demasiado de las empresas en las cuales trabajan. Parece que los empleados ven solamente su lado, pero no comprenden que su cambio de actitud puede ser fundamental para su crecimiento profesional y su valoración dentro de la empresa en la cual trabajan. En realidad, deberían preocuparse en ser proactivos y en demostrar su capacidad real, antes de pensar en cambiar de trabajo.
¿Quiere aprender a enfrentar las dificultades del mercado de trabajo y ser una persona vencedora? Entonces, no se pierda el Congreso para el Progreso, que se realiza los lunes en la Universal.
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