Los padres normalmente se empeñan en elegir la mejor escuela para sus hijos, pero muchos no logran comprender que las lecciones que los niños necesitan aprender para la vida están más allá de las enseñadas en las materias regulares, y no se dedican a transmitirles los valores y aprendizajes que sus hijos necesitarán en la vida cotidiana. Están tan ocupados trabajando para darles “lo mejor” a sus hijos que lo que realmente es lo mejor, dejan de dárselo.
Viendo la necesidad que muchas niñas presentaron, surgió la propuesta del Godllywood School, un proyecto que busca enseñarles a las jóvenes un comportamiento distinto frente a las actividades del día a día.
Ellas reciben valiosas lecciones que hacen que crezcan aprendiendo a conciliar los diversos papeles que una mujer ejerce, sin considerar que eso sea un peso o que no tienen el don para esto. Aprenden a cuidarse a sí mismas, al ambiente en el que viven y a mantener una fe viva.
En el mes de marzo se ha graduado un grupo más. Niñas de 6 a 14 años concluyeron 3 meses en los que aprendieron mucho más que buenos modales, aprendieron toda la belleza de ser mujer y cómo tienen el don de transformar las cosas a su alrededor.
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